El expresidente de Bancolombia y exmiembro de la Junta Directiva de EPM, Carlos Raúl Yepes, insistió este lunes en que el caso de Hidroituango no fue de corrupción y lanzó una alerta por lo que implicaría un posible cambio de contratista del proyecto, lo cual llevaría a un retraso de las obras y obligaría a EPM a pagarle al BID (Banco Interamericano de Desarrollo) $16.5 billones en un plazo de 45 días.
En declaraciones a la cadena W Radio, el directivo empresarial añadió que además de esta suma, estaría en riesgo también el pago de las aseguradoras, además del cobro de los créditos de otros bancos con el proyecto y al final se encarecería el costo de la energía en el país, tomando en cuenta que Hidroituango generará el 17 % por ciento de la energía nacional, parte de ella a partir de junio de 2022, como esta proyectado.
“Tenemos muy claro que lo que pasó Hidroituango no es un caso de corrupción como lo quiso hacer aparecer el alcalde (Daniel Quintero)”, dijo Yepes, al reconocer que hubo fallas en el proyecto que se rectificaron en su momento basados en tres consignas: proteger la vida de las personas, proteger el medio ambiente y salvar el proyecto.
Recordó que dichas decisiones, tomadas en su momento por la Junta de EPM, permitieron que como consecuencia de la emergencia no se registrara ni un solo muerto, aunque fue un momento difícil y de mucho sufrimiento para todos los involucrados en el proyecto. Por esto, recomendó que no se vaya a tomar la decisión de cambiar al contratista, pues esto implicaría que la primera turbina, que está proyectada para encenderse en junio del año entrante, no entre en operación.
“Puedo asegurar que este contratista va a sacar el proyecto adelante, que será más costoso sí pero sin corrupción. No es fácil conseguir un nuevo contratista, sería irresponsable en un proyecto que está cercano al 90 por ciento en su ejecución”, advirtió Yepes.
El directivo empresarial aseguró que un problema en Hidroituango, además ser un problema EPM, es grave para Medellín, para Antioquia y para Colombia. Yepes le confirmó a la emisora que es verdad que el crédito con el BID, que estaba estipulado para un pago a 40 años, se modificó con el cambio del Gobierno Corporativo de EPM por decisión del alcalde Quintero al inicio de su mandato, lo que trajo consecuencias en la credibilidad y en la confianza.
“La preocupación del BID viene desde que se empezaron a tomar las primeras decisiones por el Alcalde, veíamos el gobierno corporativo como una ventaja, pensábamos en la incidencia ambiental, en la vida, pero a Quintero no le gusta tener talanqueras sino tomar decisiones solo y su equipo lo sigue. El gobierno corporativo de EPM era el mejor y lo cuidábamos y pensábamos en el ciudadano, que es el dueño real de EPM, que le transfiere 1,5 o 1,6 billones de pesos a Medellín al año, y eso se pone en riesgo, además del BID, los bancos, las aseguradoras”, insistió el exmiembro de la Junta.
A la pregunta de si a pesar de todas las polémicas que se han tenido con el alcalde Quintero habría la posibilidad de un diálogo para enrutar el camino, Yepes afirmó que sí, que siempre debe haber espacio para el entendimiento, pero solo si el mandatario cambia su modo de proceder en este y en varios temas de ciudad en los que, considera Yepes, está errado.
El exdirectivo de Bancolombia también recordó que fue el primer miembro de la Junta de EPM que renunció al cargo precisamente cuando Quintero fue elegido, dando a entender que adivinó lo que se venía, ya que en su campaña a la alcaldía el mandatario fue vehemente en las críticas hacia el proyecto y en la forma como se venía solucionando la crisis.
Finalmente, Yepes les pidió a a la Contraloría sensatez para tomar sus decisiones, así como abogó porque tanto la Fiscalía como la Procuraduría, el Congreso y el Gobierno Nacional estén atentos a lo que pasa con Hidroituango y que intervengan, porque es un problema de grandes dimensiones que terminará afectando a todo el país.