El exalcalde apoyará a Andrés Julián Rendón, pero algunos candidatos de derecha tratan de mantenerse cerca para arañar parte de su capital político.
Federico Gutiérrez cantó su voto por la Gobernación la semana pasada: dijo de manera clara que su fórmula será el candidato del Centro Democrático, Andrés Julián Rendón. Pero desde entonces ha tenido que salir varias veces a confirmar esa decisión. ¿Por qué? Pues lo que ocurre es que hay candidatos que le siguen buscando el lado porque ser fórmula de Gutiérrez es también arrastrar parte de los votos que el exalcalde tiene en la región.
El caso más visible es el de Mauricio Tobón, quien confirmó que hoy se anunciará si será él o Juan Diego Gómez el candidato que salga de esta llave para la Gobernación. La salida más confusa de Tobón fue el domingo pasado. El candidato afirmó en redes que él y Gómez eran “la fórmula única y oficial (en mayúsculas) para la Gobernación de los ciudadanos con Federico Gutiérrez (...)”. La publicación la acompañó con una fotografía en la que él, Gómez y el exalcalde posaban abrazados.
El mensaje causó resquemor no solo por lo ambiguo, sino porque fue una respuesta a una publicación previa hecha por Rendón, quien había salido a insistir que él era la fórmula de Gutiérrez. “Somos la fórmula única y oficial (en mayúsculas) de Federico Gutiérrez a la Gobernación. Esta alianza, por acuerdo mutuo, se compromete a recuperar la ciudad y la seguridad del territorio”, expresó.
La cosa es que esta última salida fue tan solo parte de una seguidilla de aclaraciones que emprendió Gutiérrez luego de cantar su respaldo. La primera ratificación fue el 14 de septiembre pasado, dos días después de revelar su voto. El exalcalde dijo: “Mi fórmula se llama Andrés Julián. En manos suyas y de otros candidatos está la oportunidad de ampliar la coalición para ganar”.
Pasaron otros dos días e insistió: “Siempre hay que honrar la confianza y la buena fe. Me informan de publicidad conjunta con otros candidatos con quienes no hemos hecho alianzas. Les pido que se respete eso”. Al día siguiente se pronunció Rendón y, minutos más tarde, apareció Tobón. Lo consultamos justo sobre este asunto y, contrario a su mensaje, reculó y dijo no ser la fórmula de Gutiérrez.
“No he dicho que soy la fórmula única de Federico; dije que era la fórmula única de los ciudadanos. He dicho que hay ciudadanos que quieren votar por mí a la Gobernación y por Federico a la Alcaldía”, expresó. Y luego agregó: “Andrés Julián es el candidato de Álvaro Uribe y de Luis Alfredo Ramos. Pero ellos no son los dueños de la derecha; la derecha es amplia, tiene sectores que no están con el Centro Democrático ni con Ramos”.
Y aunque Tobón cuestionó la adhesión de la U y los liberales a la campaña de Rendón, aclaró no tener nada que lo distancie con él y que su apuesta por apoyar a Gutiérrez es solo por coherencia, “porque es el mejor candidato para defender a Medellín de Petro y Quintero”. Similar fue la postura de Gómez, quien se ha mostrado cercano a Gutiérrez desde que comenzó la campaña en la región.
El candidato conservador dijo que no importa que el exalcalde apoye a Rendón, pero luego expresó: “La mejor fórmula a la Gobernación es quien salga entre nosotros y Federico Gutiérrez a la Alcaldía. Una fórmula ganadora, de derecha y centro-derecha, incluyente, distinta a la de Uribe”. También dijo que su respaldo a Gutiérrez es coherente porque fue él quien primero se montó a una tarima para apoyarlo durante las presidenciales de 2022.
Es justo aquí donde la ecuación se invierte y, según el analista Fredy Chaverra, candidatos como Tobón y Gómez hablan de Gutiérrez como su fórmula a la Alcaldía para tratar de pescar votos en la región. Como Creemos —el partido de Gutiérrez— tiene una personería jurídica reciente, lo que puede endosarles a campañas como estas es lo que ahora llaman el “factor Fico”: votos de opinión y no por estructura política o de partido.
“Lo que buscan Tobón y Gómez es ampliar el radio de reconocimiento que pueden tener en Medellín y el área metropolitana, que es el gran fortín de cara a la elección de gobernador”, explicó Chaverra. La cosa es que, según el analista, la movida es “absurda” porque Gutiérrez ya dio un nombre y lo que están haciendo “es tratar de capitalizar la imagen del exalcalde a través de la confusión”.
En juego, aunque no todos serían endosables, están los votos. Recordemos que Gutiérrez sacó 1.385.372 apoyos en Antioquia durante la primera vuelta presidencial. Esa fue casi la mitad de votos que consiguió en medio de su aspiración y en el departamento no se rajó en Medellín y el área metropolitana, sino en regiones como Urabá, Nordeste y Bajo Cauca.
Aquí aparece el último elemento de esta puja: aunque hoy Tobón y Gómez insisten en mantener abierta la puerta del diálogo con Rendón —con quien no pudimos conversar previo al cierre de esta edición—, atomizar los votos que Gutiérrez pueda tener en el centro del departamento solo le daría más “alas” a la candidatura y maquinaria que tiene en las regiones el exgobernador Luis Pérez, que hoy puntea en todos los sondeos.
