En las últimas horas, las autoridades del municipio de San Rafael, en el oriente de Antioquia, reportaron nuevas amenazas de muerte contra el mandatario local de este territorio, Eduin Aniceto Giraldo Quintana.
Según expresó el alcalde, pese a que ya fue interpuesta la respectiva denuncia ante la Fiscalía, el mandatario ha recibido varios mensajes amenazantes en las semanas recientes por lo que las autoridades competentes adelantan el estudio de seguridad para implementar las medias necesarias para salvaguardar la vida del mandatario.
Cabe recordar que este mismo alcalde ya había recibido amenazas contra su vida el pasado 28 de abril, al parecer por las AGC.
Este nuevo episodio de orden público enrarece aún más la situación en el oriente del departamento y que ha encendido las alarmas al más alto nivel ante un posible escalamiento de la confrontación armada tras conocerse los planes de expansión del Clan del Golfo y de otras bandas del Aburrá en esta zona de Antioquia.
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“La premisa es que hay unas alertas de reordenamiento de la delincuencia en el Oriente que requieren de estrategias no solo militares y de Policía, sino sociales, que sean apoyadas por el Gobierno nacional para atender esa población específica”, explicó el senador Nicolás Albeiro Echeverry, vicepresidente de la comisión del Congreso que hace seguimiento al tema.
Echeverry mencionó como antecedentes para sus sospechas el cierto clima de tensión que se vive a raíz de la aparición de grafitis y pasquines del Clan del Golfo, lo mismo que la ocurrencia de operativos de la Fuerza Pública que hacen ver que algo grande se está cociendo.
De acuerdo con esas informaciones, presumiblemente por órdenes de Elkin Posada Casarrubia alias El Cura, señalado como cuarto cabecilla del Estado Mayor Conjunto del EGC, se estaría conformando el frente Carlos Mauricio García Fernández “Doble Cero” -como homenaje al jefe del bloque Metro que fue asesinado por sus mismos excompañeros de las Auc en mayo de 2002 en Santa Marta- y al mando estaría Oliverio Isaza Gómez, alias Terror, uno de los ocho hijos de Ramón Isaza, el exjefe desmovilizado de las Autodefensas del Magdalena Medio.
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Aunque esa subestructura ya tendría incidencia en municipios del Magdalena Medio y del Norte de Antioquia; su mayor fuerza estaría ahora en el Oriente, donde se ha notado su presencia en Abejorral, Argelia, Nariño, Sonsón, Alejandría, Concepción, El Peñol, Guatapé, Granada, San Carlos, San Rafael, Cocorná, San Luis, San Francisco, El Carmen de Viboral, El Retiro, El Santuario, Guarne, La Ceja, La Unión, Marinilla, Rionegro y San Vicente.
La motivación para buscar dominar la subregión de estos grupos sería manejar las rentas criminales del narcotráfico más las que provengan de un nuevo florecimiento de la minería de oro. De hecho, cada vez aparecen más noticias de choques entre el Clan y bandas de El Mesa por los réditos de la minería en el oriente antioqueño.