La avioneta que cumplía funciones de ambulancia aérea y que se accidentó en el norte de Antioquia en la mañana de este jueves, ocasionando la muerte de cuatro personas, apenas se dirigía a cumplir con un servicio en la ciudad de Medellín. Por esta razón, en el percance no pereció ningún paciente.
La empresa Sky Ambulance, dueña de la nave, confirmó la identidad de las víctimas de este siniestro aéreo. Fueron los pilotos Carlos Arturo Sarabia Carrizosa y Juan Sebastián Gómez Pinzón, así como la médica Camila Patricia Vanegas y el enfermero Ángel Onofre Marañon Medina.
La avioneta, una Beechcraft C90 con matrícula HK4684, tipo bimotor, había partido del aeropuerto Los Garzones, de Montería a las 6:11 a.m. de este jueves con rumbo a Medellín. De acuerdo con Esneyder Motta, coordinador administrativo de Sky Ambulance, su misión consistía en recoger a un enfermo para devolverlo a la capital cordobesa en horas de la mañana de este mismo día.
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Sin embargo, minutos después, cuando la nave sobrevolaba por un área rural entre los municipios de Yarumal y Santa Rosa de Osos, en el norte de Antioquia, hizo su último reporte a través del sistema de radio ayudas de la Aeronáutica civil declarándose en emergencia y al parecer después se desplomó a tierra.
Las causas del siniestro aéreo son materia de investigación, pero según reportó el comandante de la Policía Antioquia, coronel Carlos Andrés Martínez, hubo una explosión.
De acuerdo con Motta, los minutos previos a la salida del terminal de origen, todo había transcurrido de manera normal. “Ellos cumplían el itinerario señalado y partieron a la hora convenida”, apuntó para luego señalar que tanto el director de operaciones como la directora de seguridad operacional de la compañía se disponían a viajar hasta el área de los hechos para tener información ampliada de lo que pudo ocurrir.
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El directivo informó que el capitán Sarabia llevaba tres años al servicio de Sky Ambulance, en tanto que el piloto Gómez ajustaba más o menos cuatro meses. Por su parte, la doctora Vanegas apenas tenía un mes de vinculada. El enfermero Marañon era el más antiguo como empleado, con casi cuatro años de servicio.
Con respecto a la avioneta, según Mota, era una máquina que de acuerdo con los registros fue construida en 1990 y estaba desde hace dos años en poder de la empresa, que era su propietaria. En su historial, añadió, no se tienen antecedentes de que hubiera tenido ningún problema.
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Como suele ser común en su rutina según la cual los pacientes llegan a un aeropuerto y allí abordan la ambulancia aérea, en este caso debía recoger a un usuario en el aeropuerto Olaya Herrera y volver con él a Montería, en una operación que debía tardar entre dos y tres horas.
Fuera de la avioneta accidentada, Sky Ambulance tiene dos aeronaves medicalizadas más, fletadas para el transporte de enfermos que contratan sus servicios de movilización entre ciudades.
