Las despedidas, homenajes, abrazos y lagrimones ya hacen parte del pasado. Con su salida de la cancha llega una nueva vida para Víctor Hugo Aristizábal Posada.
Del partido de homenaje quedan unos datos casi anecdóticos, como los dos invitados que pocos esperaban: Carlos Jiménez -Caliche-, uno de los mejores amigos de Aristi en su época como juvenil, y el travesaño de la portería norte que le impidió celebrar a Aristizábal una última tripleta en su partido de despedida.
Lo demás, el juego bonito, los toques, el escorpión, la chilena y la emoción del adiós del goleador. Ah, y cómo no decirlo, la fiesta que se realizó luego de una comida en el hotel San Fernando Plaza, y que siguió en el mismo lugar con 400 personas, con los Cantores de Chipuco, igual jolgorio, menos lágrimas, y uno que otro pasadito de copas que alegró la reunión que tuvo hasta espectáculo de samba para Aristi.
¿Un regalo especial? Pues el espectáculo de baile que le hicieron sus dos hijas, María Camila y Juanita, a su papá Víctor Hugo. Fue lo que prendió la fiesta. Tanto que hasta el Pibe Carlos Valderrama, poco amante de la rumba, terminó enfiestado.
¿Y ahora?
Pues la vida de Aristizábal y de su familia cambió desde ayer mismo, cuando se levantó luego de la fiesta que duró hasta que el sol volvió a salir en el horizonte.
Lo primero en la lista será el arqueo de cajas y cuentas, pensando en la Fundación Colombianitos, que recibirá el dinero de la recaudación del duelo del sábado, luego de que se paguen los gastos del alojamiento, transporte y gastos de los invitados de afuera de Medellín. Ayer, Juan Pablo Ángel y Luis Carlos Perea fueron los últimos en salir de la ciudad.
Los números dicen que los 44.174 aficionados que llegaron al Atanasio Girardot y dejaron $662.978 millones. Un buen porcentaje de este dinero se irá en los gastos de la organización, pero lo demás se destinará para la fundación, impulsada por la periodista colombiana Ángela Patricia Janiot, del canal CNN.
Colombianitos trabaja por la rehabilitación de los niños víctimas de minas antipesonal y explosivos. El programa piloto de la entidad es Goles Para Una Vida Mejor y allá irán los dineros.
Igualmente, y tras la trasnochada, hoy volverá a los trabajos con los delanteros de Nacional. El sábado, Víctor Marulanda ya hablaba de las bondades de su trabajo con Carmelo Valencia, "a quien se le nota el trabajo con Víctor", comentó el presidente. Y le toca, porque ayer comenzó una nueva vida para el goleador.
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