Hoy se cumplieron cuatro años de uno de los casos judiciales más enigmáticos de los últimos tiempos en Medellín: el de dos muchachas de 17 años que fueron desmembradas y metidas a una caneca con cemento, dentro de una vivienda del barrio Boston.
Las madres de las víctimas continúan dando la batalla jurídica con tutelas, pero las embarga el dolor porque el sospechoso de agredir a las adolescentes sigue libre, sin haber pagado un solo día de prisión. En nuestra sección ¿EN QUÉ VA EL CASO?, El Colombiano y Revelaciones del Bajo Mundo no dejan que este este hecho caiga en el olvido.
El vil asesinato de dos niños a manos de sus madres tiene conmocionada a la sociedad de Medellín. Voces de protesta vuelven a levantarse contra el maltrato infantil, como en cientos de ocasiones pasadas, cuando los pequeños también fueron víctimas de familiares, balas perdidas o combos delincuenciales.
Pero no solo esos dos casos han hecho que la semana sea terrible para la juventud en la ciudad. El homicidio a tiros de un adolescente de 14 años y el hallazgo de una joven de 18 enterrada en una fosa son otros sucesos que entristecen a la comunidad.
En semana de las madres, que terminó ayer con la celebración de su día clásico, el amor de dos mamás fue puesto a prueba cuando sus hijos se volvieron presuntos asesinos.
Pese a la sangre derramada, ninguna de las dos se apartó del afecto por sus descendientes, aunque obraron de forma distinta. Una pidió que no enviaran a su muchacho a la cárcel, mientras que la otra llevó a su niña a las autoridades. Dos maneras diferentes de amar, pero amor al fin y al cabo.
Una mujer de 22 años fue capturada por la Sijín Antioquia, indiciada por el asesinato de su bebé de apenas cuatro días de nacido.
La Policía presentó a la capturada en Medellín antier, e informó que la ciudadana tiene antecedentes de un aborto y que trató de ocultar su último embarazo.

Esta es la mujer implicada en el homicidio de su bebé.