Un lanzagranadas y una carabina serían las armas que una organización delictiva del corregimiento Altavista tendría destinadas para el asesinato de un policía y del alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez.
El plan criminal se venía gestando desde hace un mes, cuando un informante se presentó al búnker de la Fiscalía y entregó los primeros datos que configuraron la investigación. Esta es la reseña del caso, elaborada por El Colombiano con apoyo de Revelaciones del Bajo Mundo.