A pesar de que grupos de veteranos y de familias de soldados norteamericanos extraviados durante la guerra se han opuesto a la medida, el presidente Bill Clinton decidió levantar el embargo comercial estadounidense de 30 años de duración en contra de Vietnam. El embargo fue impuesto contra Hanoi en 1964 y se extendió a todo el país después de que en abril de 1975 las fuerzas comunistas derrocaron al gobierno de Saigón, apoyado por Estados Unidos.
Al amparo de la lucha electoral en Estados Unidos, el presidente Bush estampó su firma en la famosa Ley Torricelli, que hace más drástico el embargo comercial a Cuba. Le toma así la delantera al candidato Bill Clinton, quien había prometido comenzar su presidencia, en caso de ganarla, con esta medida. Es así clara la intención de ambos candidatos de esgrimir una política anticastrista dura con tal de ganar votos de los exiliados cubanos. La Ley extiende a filiales de las compañías estadounidenses la prohibición de comerciar con Cuba y amenaza con tomar represalias contra las multinacionales que exporten productos, como alimentos y petróleo, entre otros, a la isla caribeña. Además, estipula la prohibición de entrar en puertos de Estados Unidos, durante seis meses, a barcos que hayan comerciado con Cuba, y contempla sanciones a los gobiernos que tengan tratos preferentes con la isla.
Ningún aspecto de la vida se libra del impacto del embargo comercial impuesto por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas después de que Irak invadiera Kuwait en 1990.
