Tomate de árbol, el dulce de nuestras abuelas
La acidez del tomate de árbol lo hace un ingrediente ideal para generar contrastes. Un clásico de nuestros hogares.
La magia de los ingredientes, recetas e historias que llenan de sabor nuestras cocinas inspiran las páginas de Paladares, una revista que circula cada mes para suscriptores de El Colombiano.
Originario de los andes suramericanos, el tomate de árbol o tamarillo, como también es conocido, se encuentra en abundancia en países como Colombia, Ecuador y Perú, sin embargo, es un alimento que todavía no ha sido explorado lo suficiente en la cocina.
Su acidez facilita la combinación con otros ingredientes que lo enriquecen en matices, logrando ese contraste agridulce especialmente buscado en la elaboración de postres, mermeladas, salsas, aderezos y hasta tortas de sal. Es una fruta muy exótica que nos invita a arriesgarnos con nuevas mezclas y descubrir sabores. Compartimos una receta de Dulce de tomate de árbol con anís, del restaurante Donde Edward, en el corregimiento de Santa Elena.
Preparación para cinco personas
Ingredientes
5 tomates de árbol
2 tazas de azúcar
1 taza de agua
Anís estrellado al gusto
Quesito campesino al gusto
Preparación
- Hacer una cortada leve a lo largo de cada tomate y otra alrededor del tallo sin llegar a desprenderlo.
- Poner los tomates en agua hirviendo durante 3 minutos. Retirarlos y sumergirlos en agua fría para luego pelarlos.
- En otra olla agregar las dos tazas de azúcar y una de agua y poner a reducir hasta que se haga el almíbar.
- Sumergir los tomates en este durante 5 minutos y finalmente agregar estrellas de anís al gusto. Servir frío, acompañado con queso campesino.