Tendencias

Murió Pablo Guerrero, maestro y pionero de la fotografía en Antioquia

La Biblioteca Pública Piloto conserva y exhibe parte de su obra. Su libro La mirada al viento reúne imágenes tomadas en zonas rurales del departamento.

15 de abril de 2025

Pablo Guerrero, fotógrafo y uno de los fundadores del Club Fotográfico de Medellín, murió este martes 15 de abril a los 94 años. La noticia fue confirmada por la misma institución en sus redes sociales.

La vida de Pablo Guerrero

Guerrero nació en Bogotá en 1931 y se radicó en Antioquia, donde desarrolló la mayor parte de su trabajo fotográfico. En 1955, tras participar en un concurso de la Biblioteca Pública Piloto, cofundó el Club Fotográfico de Medellín, entidad que ha reunido y formado a fotógrafos durante varias décadas.

Lea aquí: La mirada al viento, un libro de Pablo Guerrero

Su producción, centrada en el registro de la vida rural, el paisaje y las transformaciones sociales, se encuentra mayoritariamente en blanco y negro. En 2020, su archivo fotográfico fue incorporado al fondo de la Biblioteca Pública Piloto, junto al de Benjamín de la Calle, Horacio Gil Ochoa y Gabriel Carvajal.

Guerrero fue reconocido con el título de Artista FIAP (AFIAP) por la Federación Internacional del Arte Fotográfico. Fue nombrado Socio Honorario, Socio Emérito y Socio Fundador Ilustre del Club Fotográfico.

Seguro le interesa: Antonio Gaudí, el genio de la arquitectura que va camino a los altares

“La luz es vida”, le dijo el maestro Pablo Guerrero a EL COLOMBIANO en 2022. Según una semblanza publicada por la Biblioteca, su vínculo con la fotografía comenzó cuando tenía unos siete años. Su hermano mayor lo llevó a una tertulia cultura. Allí escuchó por primera vez el nombre de Rembrandt y vio una reproducción de El hombre con yelmo dorado. Aquella imagen lo impactó tanto que intentó llevarse el libro a casa. .

Aunque su primer contacto fue con la pintura, su trayectoria se definiría en la fotografía. Guerrero intuyó que los juegos de luz y sombra ya habían tenido su tiempo en la historia del arte pictórico.

Guerrero se trasladó a Medellín a los 22 años mientras trabajaba en una editorial. En la ciudad estudió inglés en el Colombo Americano y a leer. Gran parte de sus lecturas fueron autores antioqueños, entre ellos Tomás Carrasquilla y Gregorio Gutiérrez González. Aquellos textos le despertaron el interés por conocer la geografía regional, que más tarde registró con su cámara.

Lea aquí: ¿Ni se va de viaje ni asiste a las procesiones de Semana Santa? Esto le interesa

Durante más de dos décadas recorrió pueblos, caminos, montañas y veredas, construyendo un archivo visual de la vida cotidiana en Antioquia. En su libro La mirada al viento. En Antioquia vista por un fotógrafo del siglo XX —publicado por la Biblioteca Pública Piloto como parte del proyecto de conservación de su obra—, se incluyen imágenes de cocinas de leña, filtros de barro, plazas, iglesias y campesinos en actividades diarias. Algunas fotografías capturan momentos que ya no existen, como la antigua catedral de Sonsón, destruida por un terremoto en 1962; otras retratan escenas que aún persisten en el paisaje y la cultura local.

Toda su obra fue realizada con luz natural y sin intervención digital. “Jamás retoqué una imagen”, afirmó en sus entrevistas.