Ciencia

Encuentran una cueva en la Luna

Por esta estructura natural fluyó lava en el pasado y podría servir de base para la exploración humana.

19 de octubre de 2017

Si se piensa establecer una colonia en la Luna, lo primero que se viene a la cabeza es ¿dónde van a vivir?

Pues en una caverna. Esa pareciera ser la respuesta adecuada hoy, cuando la agencia espacial japonesa reveló que encontraron una en la región Marius Hills.

Hasta ahora nadie ha permanecido más de tres días en este satélite natural. Los trajes de astronautas no son suficiente protección para la variación extrema en la temperatura, la radiación y los impactos de meteoritos.

A diferencia de la Tierra, la Luna no posee atmósfera ni campo magnético que brinde protección.

En el estudio publicado en Geophysical Research Letters se describe la cueva, un agujero de lava intacto. Este tipo de orificios son canales naturales que se presentan cuando un flujo de lava forma una corteza dura, que engruesa y forma un techo sobre el aún movedizo flujo. Cuando la lava se detiene, con frecuencia el túnel drena dejando una cavidad hueca.

Para Junichi Haruyama, investigador de la agencia espacial Jaxa, “es importante saber dónde están y cuán grandes son si vamos a construir una base lunar”. Es además útil para la ciencia básica, por ejemplo, para hallar nuevo tipos de rocas, datos del calor y de temblores.

La detección indirecta la hizo la nave japonesa Selene, cuya misión no era buscar esas estructuras. Pero los científicos hallaron en sus señales unos ecos que pensaron podían ser indicios de una cueva.

Al consultar con la Nasa información de las naves Grail y recoger datos de alta calidad acerca de déficits de masa detectados por estas, estrecharon la búsqueda a Marius.

“Ellos conocían de esos indicios pero no sabían cómo era esa cavidad”, dijo Jay Melosh, coinvestigador de Grail en Purdue University. Con la nueva información se determinó la forma de la caverna. Debe tener al menos siete kilómetros de extensión y uno de ancho.

En la Tierra también existen pero son más pequeñas.

La existencia de estas cavidades había sido sugerida antes pero no se habían detectado. Ahora con datos de radar y gravedad aparecieron.