Los nuevos espacios de la ciudad
La visión del desarrollo de Medellín se plasmó en el Plano Regulador de la ciudad, desarrollado a partir de la década de 1950, por los arquitectos Paul Wiesner y José Luis Sert, en el cual se definió al río Aburrá como el eje estructurante del desarrollo urbano de Medellín y el de todo el valle de Aburrá, con énfasis en la zona plana e incluye la protección de las laderas. En el actual POT se ha mirado nuevamente al río como el corredor ambiental y motor del desarrollo urbano, después de que por décadas se mantuvo en el olvido, hasta que EPM construyó la planta de tratamiento de aguas residuales de San Fernando y actualmente la de Aguas Claras en Bello, con el fin de recuperar el río.
La Sociedad de Mejoras Públicas SMP, fue visionaria al recoger las propuestas de los mencionados urbanistas, promovió la canalización del río, estructuró el corredor multimodal y tuvo en cuenta el cinturón verde como un desarrollo a futuro; el mismo que se desvirtuó cuando varias alcaldías han permitido los asentamientos en la parte alta de las laderas; sin embargo, con el proyecto actual del jardín circunvalar, se pretende corregir el daño generado en el ambiente y la estabilidad de la ladera.
El nuevo Medellín ya estaba proyectado desde hace 60 años, se definió una zona ambiental y de desarrollo urbano, lo que hoy se conoce como los proyectos: Río Norte, Río Centro y Río Sur, de ellos ya existen obras como el Parque del Río y el Cinturón Verde como límite entre lo urbano y lo rural, para controlar los asentamientos por fuera de esta línea. No se previó por parte de administraciones pasadas, que la ciudad sería impactada por un problema de desplazamiento procedente del campo, situación que ocasionó el desorden urbano. Este problema se pretende corregir dentro de los lineamientos del nuevo POT con los macroproyectos, los panes parciales y obras de la nueva alcaldía como los Proyectos Urbanos Integrales PUI, que forman un compendio de planes de renovación urbana, promoviendo el desarrollo.
Dentro de este contexto los proyectos solos no son la solución, el Parque del Río aunque se ha considerado que no era una prioridad, es una realidad; el éxito en la apropiación y el cuidado de estos espacios por parte de la comunidad, consistirá en la implementación de programas de convivencia, esparcimiento y cultura ciudadana.
Así mismo como prioridad para conservar la filosofía del Cinturón Verde, sería recomendable promover la reforestación, mediante la compra de tierras y planes de siembra masiva de árboles en predios de los pobladores, convirtiéndolos en guardabosques, con el propósito de proteger la zona de invasiones; esta posibilidad complementaría el esfuerzo que se realiza tanto en la obra del Parque del Río, como del Cinturón Verde, que serán nuevos espacios para el disfrute ciudadano.