La “superioridad” de la economía
Un trabajo reciente de Marion Fourcade (2018, “Economics: A View from Below”) se suma a otros de la autora que abordan el mismo tema: la pretendida superioridad de la economía sobre las otras ciencias sociales. En este caso el título es una ironía, es una visión desde una disciplina supuestamente inferior, la sociología.
Son temas complicados estos donde se hace una mirada desafiante a un pensamiento científico muy establecido. Estas disputas intelectuales son más intensas en las escuelas económicas que están más cerca de otras ciencias sociales, como el institucionalismo. Acá se trata de un examen muy descarnado de las razones por las cuales Fourcade considera que la economía es dominante dentro de estas últimas. La lista de agravios es larga.
El primer subtítulo es sugestivo “los moralistas velados” y continúa con una constatación acerca de la creciente influencia que adquirieron los economistas en el siglo XX. Esa influencia desplazó a los abogados, historiadores, politólogos, entre otros, de las administraciones públicas. Los economistas están, entonces, involucrados en muchas de las grandes decisiones que toman las sociedades. El consejo que ofrecen es tomar decisiones racionales desde el punto de vista económico, dejando de lado la solución de los graves problemas sociales.
También los economistas son “narradores de historias”, que hoy son capaces de explicar la crisis de 2008 sin ruborizarse cuando, de acuerdo con Fourcade, tuvieron mucho que ver en su gestación. Incluso la autora da un golpe bajo cuando recuerda la película Inside Job que tiene su versión de esa crisis.
Pero más allá de esos puntos en los que aparentemente el problema son los economistas y no la economía, Foucade habla como Hayek de la pretensión de conocimiento de la economía. De su afán de acercarse a las ciencias físicas y a sus métodos, corriendo el peligro de alejarse de los hechos y ser irrelevante.
En todo caso, concluye Fourcade, la visión del mundo y la metodología de la economía son su fortaleza y la razón que explica el progreso de la disciplina y su influencia. Se ha desarrollado como reflexión autónoma, pero con el apoyo de otras ciencias. Tiene la capacidad única de ser un cuerpo teórico coherente en expansión, con mucho debate en su interior. Con la característica de ser funcional al capitalismo y por esa razón haber escalado hasta la cima de las ciencias sociales.
No se menciona que la fortaleza única de la economía es su capacidad de distinguir y conciliar entre lo normativo (lo que debe ser) y lo positivo (lo que es). Con esa gran dotación los economistas están particularmente bien capacitados para enfrentar y resolver problemas. En otras palabras, la formación en economía da criterio.
No es fácil el diálogo entre las ciencias sociales. En el escrito de Fourcade donde se dicen tantas cosas, una de las más positivas es la importancia que se da al trabajo interdisciplinario. Esa sería una forma de mejorar la comunicación y reducir la prevención.