Fondo de Garantías apoyó a más de 500.000 empresas
Como extraordinario calificó el presidente del Fondo Nacional de Garantías, Raúl Buitrago Arias, el año 2020 para la entidad, luego de tenderle la mano a más de 506.000 empresas y trabajadores independientes a nivel nacional en medio de la complicada situación por el covid-19.
El funcionario destacó el papel que desempeñó la entidad en medio de la emergencia generada por la pandemia, donde tuvo que ser capitalizado en cerca de 3,25 billones de pesos, para responder con todas las necesidades que se les presentaron a los empresarios, trabajadores independientes y los hogares.
En total fueron 19,8 billones de pesos en créditos respaldados por parte de la entidad en 2020, cifra que esperan incrementar hasta los $37,1 billones al cierre de 2021, donde solamente $29,6 billones se habrían colocado específicamente en los momentos más críticos de la pandemia y la reactivación del país.
Así lo explicó Buitrago en entrevista con COLPRENSA, donde reveló los detalles del balance presentado hasta el momento durante el año anterior en materia de respaldo de créditos y las perspectivas que se tienen para lo que viene en este 2021.
¿Cuál ha sido la función del Fondo Nacional de Garantías en medio de la pandemia?
Acá quiero empezar por explicar cuál es la función que cumplimos nosotros como Fondo Nacional de Garantías. En realidad, somos un fiador de los trabajadores independientes, los empresarios y de los hogares colombianos, porque a la larga lo que hacemos es entrar a cubrir aquellas deudas que por alguna razón los empresarios no pueden cumplir a los bancos o a los intermediarios financieros. Hay una diferencia entre fianza y crédito, y nosotros somos fiadores, no entregamos créditos. Por eso, cuando llega la pandemia y no se pueden generar ingresos, donde lo más difícil era mantener la liquidez de las compañías para poder pagar arriendos, nóminas, servicios públicos, a los proveedores, fue cuando desde el Fondo empezamos a incrementar los porcentajes de cobertura para enviarle una señal a los intermediarios financieros para seguir manteniendo la liquidez de las compañías.
¿Qué tanto cambiaron esos porcentajes en medio de la emergencia que vivió el país?
Marzo partió la historia del Fondo Nacional de Garantías en dos. Antes de esa fecha, el fondo cubría tradicionalmente el 50 % de las obligaciones de los deudores, es decir, por cada 100 pesos que prestaba el deudor, la garantía del fondo era de 50 pesos en caso de que se generara un impago. Cuando llega la pandemia, una de las advertencias que dio el Gobierno Nacional era que se mantuviera la liquidez de las compañías a través de facilitar el acceso al crédito, entonces las garantías subieron en una primera instancia al 60 %, lo que generó una reacción muy importante, por lo que se fueron subiendo hasta los niveles que hoy tenemos, que acumulan el 80 % de los créditos para las medianas y las grandes empresas y cubren el 90 % para las micro y para las pequeñas empresas.
¿Cuál es el balance que deja 2020?
El resultado del año pasado fue extraordinario. El Fondo Nacional de Garantías respaldó créditos del orden de los 19,8 billones de pesos, una cifra nunca antes vista en la historia del fondo, que representa un crecimiento de 32 %; y en valor garantizado nos multiplicamos 2,3 veces, lo que quiere decir que crecimos más del 100 %. Hay otro dato relevante ahí y es que estamos hablando que llegamos a 506.000 empresas que han accedido a créditos, donde se incluyen 50.000 trabajadores independientes, con lo que hemos contribuido a preservar más de medio millón de empleos con esta estructura de financiación garantizada del fondo, para que las empresas tengan capital de trabajo para mantener su operación y para mantener su nómina.
¿Qué otros cambios se dieron en medio de la pandemia?
Hay otro dato importante es que llegamos a nuevos segmentos. Antes de marzo estábamos concentrados específicamente en mipymes y a partir del periodo de pandemia entraron dos segmentos: trabajadores independientes, formales e informales, es decir que aportan a seguridad social y que no aportan a seguridad social, y también gran empresa, que era un segmento que no era atendido por el fondo.
¿Cómo fue el comportamiento de estos respaldos en las diferentes regiones del país?
El Fondo tiene presencia en el 100 % de los departamentos y en el 99 % de los municipios y el año pasado llegamos a prácticamente todos los municipios del territorio. Este comportamiento va muy de la mano con la intensidad de la actividad económica en el Producto Interno Bruto (PIB). Prácticamente un tercio de las garantías se han entregado en Bogotá, con el 32,5 %, luego está Antioquia, con 17 %; seguido por Valle, con 10 %, y Atlántico, con 5 %. Santander y Antioquia también fueron regiones muy importantes, con 4,5 % y 3,6 %, respectivamente. El resto de los departamentos representa el 26 %, lo que quiere decir que en los primeros seis está concentrado el 75 % de las garantías entregadas por el Fondo en 2020.
¿Cómo fue ese comportamiento en los diferentes sectores de la economía?
La única rama de la actividad económica a la que no le hemos garantizado créditos es administración pública, por obvias razones, pero de resto a todas en el sector privado tienen el respaldo del Fondo Nacional de Garantías. Comercio al por mayor y al por menor, industria manufacturera y construcción concentran fácilmente el 60 % de las garantías. En la primera se ha respaldado el 36 % de las garantías, en la segunda fueron 15 % y en la tercera fue el 9 %. Pero también hemos respaldado sectores muy afectados como restaurantes, hoteles, servicios turísticos y servicios culturales, donde más de 4 % se han concentrado en ese segmento.
Usted hablaba que se habían beneficiado 506.000 empresas, ¿cómo están distribuidas?
El 95 % fueron mipyme, entre esos el 75 % está concentrado en micro y en pequeñas empresas. En trabajadores independientes estamos alrededor del 3 %, y 2 % en gran empresas. Eso refleja que la restricción de crédito más severa que se enfrentó fue por parte de las empresas más pequeñas, porque fueron las que mas utilizaron garantías del fondo.
¿Cuáles fueron las líneas que manejó el fondo a lo largo de 2020 y dónde se concentró la mayor actividad?
Hay dos productos clave: capital de trabajo e inversión, que es una línea de garantía que diseñamos para poder respaldar las solicitudes de crédito de los empresarios que necesitan recursos para comprar materia prima, para pagar los arriendos y los servicios públicos. Esa línea tiene en este momento un cupo total de 9 billones de pesos y ya se han solicitado créditos que superan los 6 billones. La otra que es muy importante es la línea de Nómina, sobre todo al inicio de la pandemia, donde se colocaron alrededor de 2,4 billones de pesos en 2020.
Pero hay otras líneas que se implementaron en medio del programa Unidos por Colombia...
Tenemos líneas relacionadas con microfinanzas, que va enfocada específicamente a aquellos micronegocios y en algunos casos a vendedores informales, a la cual se destinó un billón de pesos y ya se han consumido cerca de 700.000 millones de pesos. También hay otras dos líneas que son productos nuevos: la de emisión de bonos, que se le asignó un cupo de un billón de pesos y ya tenemos solicitudes que superan ese valor, por lo que tendremos que ampliarla. La otra tiene que ver con la garantía de vivienda para respaldar a los hogares colombianos y que puedan cumplir el sueño de tener vivienda propia, pero también con una intención de reactivación económica, ya que en la medida en que la demanda se mantenga alta frente a los proyectos de vivienda, también se va a ver una demanda de todo lo que tiene que ver con el sector de la construcción.
¿Hasta cuándo se van a mantener con estas garantías?
Todas estas líneas van hasta junio de 2021. Inicialmente estaban hasta septiembre del año pasado, pero a raíz de la intensidad con la que se vivió la pandemia tomamos la decisión de extenderlas, con el aval del Ministerio de Hacienda y el Ministerio de Comercio. Por ahora estamos haciendo evaluaciones permanentes para mirar si ese plazo es suficiente, pero hasta el día de hoy vamos hasta junio.
¿Cuáles son las proyecciones que tienen para este nuevo año?
Este va a ser un año híbrido, porque se van a tener estas ayudas excepcionales hasta junio, pero a partir de julio estaríamos con los productos tradicionales, que son los que tienen garantías al 50%. En términos de colocación vamos a tener un bajón en los créditos garantizados, estamos hablando de $17,3 billones para 2021, pero en contexto cuando se compara esa cifra con el período completo abril 2020 y junio de 2021, habremos garantizado créditos por el orden de 29 billones de pesos en la parte más crítica de la pandemia y más crítica del proceso de consolidación, beneficiando a 600.000 empresas, lo que va a contribuir a preservar 1,8 millones de empleos.
En total, con los 17,3 billones de pesos que esperamos garantizar en 2021, y teniendo en cuenta que 2020 fue un año difícil, habremos colocado en los dos años recursos por el orden de los 37,1 billones de pesos en créditos garantizados, que es una cifra bien relevante. En resumen, entre 2020 y 2021 se van a colocar 37,1 billones de pesos y de esos, 29,6 billones habrán sido movilizados específicamente en el pandemia y consolidación de la reactivación.