El Niño le salió caro a Termocandelaria
Reportero por vocación. Convencido de que el periodismo es para mejorar la vida de la gente. Ahora escribo de temas económicos en El Colombiano.
A la empresa Termocandelaria le queda solo el recurso de reposición ante el mismo superintendente Delegado para Energía y Gas Combustible, José Plata Puyana, para buscar modificar la multa de 35.410 millones de pesos que anunció ayer la Superintendencia de Servicios Públicos y la más alta impuesta por la entidad hasta ahora.
El funcionario desestimó los argumentos de dificultades financieras y hechos ajenos a la voluntad de Termocandelaria para no entregar la energía a que previamente se comprometió. Esto ocurrió en octubre de 2015, cuando declaró “indisponible” sus dos unidades de generación, en Cartagena, durante casi un mes.
Para esa época, ya arreciaba el fenómeno de El Niño en el país. Esta fuerte sequía obligó a disminuir la generación con centrales hidroeléctricas y a encender más el respaldo, es decir las plantas térmicas.
Así que empresas como Termocandelaria, desde tiempo atrás recibían el llamado cargo por confiabilidad, que pagan los usuarios en sus facturas, como una especie de seguro para garantizar el servicio en tiempos de escasez de hidroeléctricidad.
Según la Superservicios, la empresa contrató el cargo por confiabilidad desde 2006, pero solo hasta El Niño de 2015 debió entrar a respaldar. De hecho, en la vigencia 2014-2015 recibió una prima de 83.067 millones de pesos para estar a punto para cuando fuera requerida.
Pero Plata Puyana concluyó en la Resolución No. 20172400004215, fechada el martes, que Termocandelaria “optó por dejar al azar el cumplimiento de sus obligaciones y esperar a que el Gobierno acudiera a su rescate, en el evento que se encontrara en apuros para honrar sus compromisos”.
Al cierre de esta edición, EL COLOMBIANO esperaba respuesta del representante legal de la compañía sancionada.