Economía

El desenguayabe sale más barato en la Minorista

Comerciantes de esa plaza dicen que tienen buenos precios y están dispuestos a negociar descuentos. Esperan que aumenten las ventas.

Soy afortunado porque me gano la vida haciendo lo que amo. Fanático de la salsa brava y los timbales. Amo a mi familia.

22 de diciembre de 2023

Los visitantes de la Plaza Minorista, generalmente, son adultos mayores y al preguntar por qué la gente joven no llega en mayor cantidad, parece ser que la falta de tiempo es el factor clave.

Pero los comerciantes comentan que si usted está pensando en ofrecer algún festín en diciembre, debería sacar el rato para visitar la central de abastos, recorrerla y escoger sus ingredientes; es un ritual agradable estar entre los aromas frutales y la música parrandera que suena en los tradicionales puestos.

Tan solo al ingresar, los estantes surtidos con todo tipo de alimentos invitan a acercarse, curiosear y llevarse los mejores víveres, la Minorista es madre de todos los demás distribuidores de Medellín y si está buscando economía, también le conviene visitarla.

Los anfitriones están esperando a que lleguen los compradores, pues ellos también quieren un buen cierre de año y están dispuestos a dar buenos precios. La invitación que hacen es a que no se pierda la caminata de temporada.

Las papas

Para los paisas, el sancocho es infaltable en estas festividades. Por eso conversamos con los distribuidores, quienes indican que prepararlo para un grupo grande facilita negociar los precios al mayoreo.

Si alguien necesita grandes cantidades de revuelto, la recomendación es llegar hasta el sector en el que están los comerciantes mayoristas. De todas maneras, caminar la plaza y averiguar en varios puestos es un ejercicio valioso para encontrar los proveedores con los que se sienta más cómodo.

En este caso, conversamos con varios comercializadores y empezamos averiguando por la papa capi. Entonces llegamos hasta el sector 7, al local 477, el de Fabio, quien nos contó que el precio se ha mantenido estable y el kilo oscila entre $2.500 y $2.700; la traen directamente desde Tunja y Nariño.

“También tengo la nevada. Esa la usan mas que todo para los ajiacos, pero a mucha gente también le gusta echarla en el sancocho porque le da espesor. Esta sí está más cara porque casi no la están cultivando. Se está manejando un promedio de $4.000 y $4.500 por kilo”.

La nevada viene principalmente del municipio de San Vicente, y Fabio mencionó que “en este momento tiene mucha plaga, por eso ya no la cultivan, pues no es rentable”.

Asesoría especial

Por ahí dicen que comprar una yuca buena es más difícil que ganar se un chance. Sin embargo, con la ayuda de un experto como Ricardo Tamayo y sus muchachos, las probabilidades de llevarse una “motosa” son más grandes.

“En este momento en la Plaza Minorista se maneja la yuca playera y la mona, todas dos son buenas, la única diferencia es que una es tierra negra y la otra es tierra amarilla. Estamos manejando un precio de $2.000 por kilo”, detalló.

Para completar el “triángulo divino”, haría falta el plátano y Mauricio Giraldo, más conocido en el sector 11 como “El Pana”, vende plátano criollo del Suroeste: “Para mí el plátano del Suroeste es el mejor y tiene su encanto. Y quizás puede ser más favorable, en estos momentos está entre $2.300 y $2.400 el kilo. Ha rebajado mucho en comparación con el año pasado que estuvo en $4.000”.

Si quiere otra variedad, se le tiene: Luis Aberto Martínez, “Congo”, lleva 24 años en la plaza y trae plátano del Urabá antioqueño. Dice que “es un platanito bueno; sirve mucho para sancocho, frijoles y patacones. Y cuando están maduros, para las tajadas y los aborrajados”. “Congo” certifica que las fincas de su proveedor cosechan calidad de exportación.

“En el momento —detalló el mercader— está a $500 la unidad y al por mayor sale en $400; ahorita un bulto completo quedaría en $40.000”. A este especialista lo ubican en el sector 11, cerca a la puerta número 15.

Intelectual del maíz

La plaza minorista cuenta con una de las secciones más grandes de Colombia dedicadas únicamente al maíz; y entre todos los expendedores de este alimento está don Ovidio Rodríguez; un hombre de cabello gris y voz suave que acreditan años de experticia.

Como la mazorca también gusta en el sancocho, le pedimos que nos asesorara en precios y calidad. Nos explicó que “aunque en el maíz se habla de 24 especies, en Colombia se están manejando dos: el calentano y el de tierra fría”.

“El grano grueso de una mazorca más grande es de tierra fría, el calentano es más amarillo y de grano más pequeño”, ejemplificó después de tomar dos mazorcas en sus manos y apuntó que el producto lo traen del Carmen de Viboral, Abejorral, Sonsón, San Vicente y Guarne.

En cuanto a precios, vende bolsas por cuatro unidades en $4.000, esas funcionan también para poner en la parrilla del asado, aunque además vende las que traen el tallo en la parte inferior y se dejan manipular más fácil en las brasas; estas últimas quedan entre $30.000 y $35.000 la docena.

Don Ovidio está ubicado en el sector 1 de la plaza y asegura que tanto él como sus vecinos comercializan un producto “calidoso”, no hay pierde con esas mazorcas y si el comprador gusta, en los locales también pueden moler y dejarlas listas para tortas y arepas.

Ya en este punto quedan faltando pocos ingredientes para el sancocho y Jaime “El Peludo” nos atendió con muy buena energía en el sector 10, nos dio precios por kilo: “El cilantro está a $3.000 el manojo, la cebolla está a $2.000 , la papa criolla a $3.000, la zanahoria a $3.500 y el repollo para la ensalada a $2.500”.

“Esos precios están una belleza, no han querido subir y más fácil están bajando. Venga que aquí el descuento se le da, sino le encimo otro mercado, no se preocupe por eso”, exclamó “El Peludo”.

En el puesto de David Aristizábal averiguamos por el limón Tahití, ese se está vendiendo a $2.400 el kilo y es el que recomiendan los que saben. También se consigue el criollo y el mandarino.

Las carnes

Las proteínas de origen animal han sido un dolor de cabeza desde hace dos años y, en su momento, tuvieron incrementos que obligaron a muchas familias a sustituirlas en la dieta.

Carlos Mario Betancur, de Serramontes, habló de los precios para esas carnes predilectas en el sancocho y nos informó que el morrillo está a $13.700 la libra, la trestelas a $10.000 y el pecho a $13.000. El osobuco de cerdo está en $5.100 y el espinazo a $5.000.

“Tenemos carne de excelente calidad, con una muy buena madurez y de animales muy sanos. A todo el mundo queremos atender, de eso se trata, de tener una buena atención y bregar a que todo el mundo lleve su carnita”, comentó.

Laura Paniagua, distribuidora de pollo, confirmó que es posible comprar el animal completo o por presas: “El precio —dijo— depende del peso, está a $13.200 el kilo, más o menos entre $42.000 y $43.000 entero, pero ya por presas el precio varía”.

Cadena detrás de todo

En la Minorista hay todo un tour disponible para “loliar” productos del agro, entender su origen y aprender a seleccionar los mejores. Y si le gusta la mística, igualmente encuentra ofertas y escenas que solo se dan en temporada decembrina.

En dicha plaza hay 1.740 comerciantes que ofrecen de todo: “Tienen una sonrisa para atender a todo el mundo, son muy especiales y cuando el visitante está viniendo cada ocho días a mercar se vuelve familia”, resaltó Jairo Arredondo, coordinador de mercadeo.

“Estamos esperando que la gente termine de salir a vacaciones y se lleve sus cositas para sus destinos, para el asado y el sancocho. Estamos esperando la reactivación porque han estado muy suaves las ventas”, añadió.

Por los años que lleva habitando la plaza, Jairo asegura que “es un sitio de atracción turística, se encuentran cosas que normalmente uno no ve en las tiendas de barrio, hay frutas exóticas y uno se puede dar el lujo de tener todos los productos del campo cerca a casa”.

Corroboró que “en todos los locales se van a encontrar cosas muy buenas, pero para que le rinda la plata hay que caminar, buscar economía y los locales especializados en lo que está buscando”.