Trasladan concierto de Vilma Palma en Medellín por lío jurídico de la carpa del aeroparque Juan Pablo II
Este show tuvo que trasladarse para el Cincuentenario debido a que el Hangar Park, donde se iba a realizar, está dando explicaciones ante un juez tras una acción popular.
El concierto de Vilma Palma e Vampiros, programado para el próximo viernes, 26 de abril, en la carpa gigante del aeroparque Juan Pablo II tuvo que trasladarse para otro sitio debido a que a este lugar, donde se realizaban eventos masivos, se encuentra en medio de un proceso judicial que tiene dando explicaciones a sus operadores.
“Lamentablemente, debido a una decisión judicial, el Hangar Park actualmente no cuenta con permiso de funcionamiento, por lo que hemos trasladado el evento al Centauro Centro de Eventos ubicado en la Avenida Regional Ruta Nacional, junto al parqueadero Parque Norte”, dijeron en un comunicado los empresarios de ese espectáculo que fue publicitado con el nombre de “Vilma Palma e Vampiros - Me siento loco tour Medellín”.
También añaden que las boletas adquiridas inicialmente serán válidas para ese nuevo sitio, y que el concierto comenzará a las 9:00 p.m. de este viernes.
En este momento cursa en el Juzgado 28 administrativo del circuito de Medellín una acción popular que interpusieron vecinos del barrio Belén y de la carrera 70, a través de una veeduría, que se consideran afectados por el fuerte ruido que se produce desde ese escenario cada que hay espectáculos de envergadura.
El recurso legal fue interpuesto en el mes de marzo abocando la salvaguarda del derecho de la comunidad a salvaguardar su seguridad y prevención de desastres prevenibles, el goce del espacio público y la utilización y defensa de los bienes de uso público.
Aunque los accionantes pedían que de manera cautelativa se ordenara la suspensión de actividades en el Hangar Park, como se llama la megacarpa, la jueza no acogió ese pedido pero sí ordenó que en un paso de dos semanas, la Secretaría de Gestión Territorial de la Alcaldía de Medellín realizara una visita de inspección para certificar que esas instalaciones cumplen con las normas de seguridad exigidas para funcionar como centro de eventos.
En un comunicado, el Hangar Park informó que dicha inspección ya se hizo y que en ella sus funcionarios entregaron toda la información requerida, “incluyendo el estudio estructural que demuestra que cumplimos con la normatividad, seguridad, capacidad, locación e instalaciones para desarrollar eventos culturales, de música y recreación.
También aclaró que “en ningún momento” la juez ordenó que se realizaran eventos en el Hangar Park.
Le recomendamos leer: El negociazo de firma mimada de Alcaldía con carpa en el Juan Pablo
Entre la documentación, los accionantes anexaron el sustento legal que prohíbe la apropiación del espacio público por parte de particulares, así como conceptos del Dagrd (Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo de Desastres de Medellín), la aerocivil y la Secretaría de Gestión y Control Territorial del Distrito de Medellín que pondrían en cuestión la estabilidad y legalidad de la estructura que sostiene la carpa, según informó el líder comunitario de Belén, Octavio Vélez.
Desde julio del año pasado, EL COLOMBIANO ha hecho varias denuncias sobre las presuntas irregularidades que habrían rodeado la habilitación de un terreno del aeroparque Juan Pablo II para una megacarpa llamada Hangar Park, con tamaño de coliseo y sin licencia de construcción.
Además, se trataba de un negocio formalizado con un contrato de Metroparques que le daba la posibilidad de usufructuar ese espacio a quien figura como cabeza de una de las empresas operadoras de espectáculos mimadas de la anterior administración del alcalde Daniel Quintero: Mauricio Jaramillo Botero, representante legal de la firma Cyan Eventos y Logística SAS. Pero detrás también estaría el empresario de espectáculos bogotano Fernando Dussan.
El contrato con Metroparques le permite a Jaramillo usufructuar la plazoleta de eventos No. 1 y la zona verde de la plazoleta No. 2 del Juan Pablo II para eventos comerciales, desde el primero de mayo de 2023 hasta el 30 de agosto de 2026. El canon mensual es de $27’370.000 pesos, IVA incluido.
Por el gran tamaño, la megacarpa puede tener un aforo cercano a los 8.000 espectadores y los arrendatarios pueden obtener entre $80 y $100 millones por el subarriendo para una sola fecha.
Posterior a la entrada en funcionamiento, los vecinos se han quejado del estridente ruido que deben soportar cada que hay shows, como el festival musical Altavoz que se realizó en diciembre en este escenario.
También puede ver: Cyan le prestó “gratis” el Hangar Park al Altavoz?
“Muchas veces el sonido llega a más de 100 decibeles, a menos de 60 metros de las casas, y esa es una locura; por eso fue que le pedimos a la jueza las medidas cautelares y ella las concedió”, indicó el líder Vélez.
Igualmente, le sugerimos: La gigantesca carpa que la Alcaldía montó en el Juan Pablo II no tiene licencia
Por su parte, desde Cyan le han solicitado al juez la aclaración de la medida cautelar, pues aunque todavía no se ha dado el veredicto definitivo sobre si el lugar puede o no seguir en pie, a los empresarios ya les han cancelado conciertos y eventos como el de las Leyendas vivas de la salsa, el aniversario del Salón amador y la Feria Jumbo.