Los 60 años de historia Coonatra, la icónica empresa que lo lleva a “pasear” por Medellín
La transportadora es una de las más populares de la ciudad y ha estado ligada a la vida moderna de la capital antioqueña. Conozca acá más detalles de sus seis décadas de vida.
Periodista de la Universidad de Antioquia. Al igual que Joe Sacco, yo también entiendo el periodismo como el primer escalón de la historia.
En el imaginario popular está escrito sobre piedra que las grandes ciudades del mundo tienen un medio de transporte público que las caracteriza. Londres tiene sus famosos autobuses rojos, New York los reconocidos taxis amarillos, hasta Venecia –con sus célebres góndolas– entra en ese selecto grupo.
Y como Medellín no se podía quedar atrás, aparte del Metro, la ciudad cuenta con otro medio de transporte que en muchos aspectos ha marcado la vida de los medellinenses. Porque, ¿quién en su vida no ha usado un bus de la empresa Coonatra más conocidos como “Circular Conozca”?
La referenciada empresa cumplió este mes 60 años de vida que celebró de forma particular. Ese día, el gerente de la empresa Mauricio Herrera Arboleda se subió a los buses y le entregó a cada uno de los pasajeros un pequeño detalle en agradecimiento por su preferencia.
En diálogo con EL COLOMBIANO, el directivo dio detalles de la historia y del trabajo al interior de la icónica transportadora paisa.
El 24 de abril de 1964 Conatra inició labores con 25 socios y 38 buses que cubrían las rutas hacia Belén, Buenos Aires y Floresta, algunos de los barrios más populosos de la urbe, en un intento de ponerle por fin orden al desordenado servicio de transporte público que se brindaba en aquel entonces y que derivó en un paro de transportadores y el posterior decreto de “libertad de rutas”.
Eran las épocas en que los viejos automotores marca Dodge y Chévrolet surcaban la ciudad –en reemplazo de los buses de escalera– llevando y trayendo pasajeros a esa metrópoli que apenas cobrabra su aire moderno.
Con el paso de los años, se fueron abriendo más rutas y fueron llegando más vehículos. La flota de Coonatra –encabezada por buses “ñatos” y “coches bala” fue llegando a más lados de la ciudad por lo que más adelante se constituyeron las rutas de Belén Terminal, Circular Coonatra, la Metropolitana Norte que va hasta Copacabana, la Circular Intermedia que se adentra en Calazans y la muy conocida Circular Sur que une el Centro con el Poblado y La Mota.
En los 90s, cuando ya la flota la componían principalmente los icónicos buses International, toda una novedad de la época, Coonatra llegó a ser la empresa de transporte público más grande del Aburrá y la segunda de todo el país, según comentó el gerente.
Hoy la empresa cuenta con 500 vehículos que cubren 22 rutas en toda la ciudad, lo que la hace casi omnipresente. Con estas, la empresa mueve al día cerca de 110.000 personas. Es decir, casi tres veces la capacidad del estadio Atanasio Girardot.
A raíz de sus prolongados recorridos, la empresa se ha ganado a pulso un lugar en el corazón de los medellinenses. El gerente Herrera dice sin atisbo de duda que un legitimo habitante de la ciudad debe haberse subido por la puerta de atrás de un bus Coonatra.
“¿Quién no se ha enamorado en un Coonatra? ¿Quién no fue a su primer día de clases en un bus de estos? Es más, yo me crié entre Bello y Copacabana, y cuando llegué a ser gerente de Coonatra se me salieron las lágrimas de la emoción porque me encontré con el conductor de la empresa que me llevaba por la puerta de atrás cuando yo iba a la escuela y no tenía para el pasaje completo”, apuntó Herrera.
¿Una ruta hasta Nápoles?
El directivo va más lejos y se atreve a asegurar que el 90% de los profesionales de Medellín alguna vez usaron alguna ruta de la empresa. El dato es sustentado en el hecho de que los buses pasan por cerca de 17 instituciones de educación superior de la ciudad.
Tan de la entraña es la empresa de buses en el imaginario paisa que en las épocas doradas del Atlético Nacional de los 90s, el equipo verde se movilizaba para sus actividades en un Coonatra, como lo demuestra un video de la época.
Otra leyenda urbana de la vieja Medellín es que el Coonatra ofrecía incluso una ruta a la Hacienda Nápoles, como quedó también registrado en una foto de la época en el que se ve un “ñato” de la empresa debajo del peculiar arco con la avioneta del capo Escobar.
Trabajo por el trato digno al usuario
Y claro que como toda empresa de buses, Coonatra también tiene sus “personajes” que en cada frenon violento o carrera desbocada se gana las maldiciones de los usuarios. Aún así, la empresa asegura que hace todo lo posible para que quienes manejen sus vehículos se destaquen por la seguridad y humanidad que ofrecen a sus pasajeros.
“Tenemos la fama de que entrar a Coonatra es difícil por los exámenes rigurosos que aplicamos. Un conductor en malas condiciones de salud no puede emplearse acá porque entendemos que esta es una profesión de mucho estres y si le llega a pasar algo manejando un bus esto podría poner en riesgo a los pasajeros”, indicaron desde la empresa.
La entidad también señaló que antes de cada jornada se hacen pruebas de alcoholemia a los conductores que se complementan con exámenes sorpresa para detectar si han usado drogas psicoactivas en su jornada.
“Es una realidad que de forma muy esporádica se han encontrado conductores que han consumido drogas, pero en vez de echarlos preferimos hacerles un proceso de acompañamiento para que las dejen. Esto incluye evaluaciones diarias”, añadió el gerente.
Y es que según Herrera, para la empresa sus empleados son vitales no solo para ella sino también para la ciudad, pues son los que llevan a las personas a cumplir con sus labores y las metas del día. Por eso el énfasis en capacitarlos constantemente no solo en seguridad vial sino también en el relacionamiento con las personas.
“La gente juzga y ataca mucho a los conductores por el comportamiento de algunos de ellos. Pero no mucha gente conoce que ellos también tienen un lado sensible. Por ejemplo nosotros les inculcamos mucho el esfuerzo de hacer el último viaje de un turno, porque en él es donde se monta la gente que no tiene recursos y que solo cuenta con ese pasaje para llegar a su casa. Y si el bus no pasa, a muchos les tocará caminar o descuadrarse en plata para poder llegar. Y por eso ellos cumplen con ese viajes. Es que uno sabe que los conductores prefieren llevar a la gente así no les alcance el pasaje”, explicó el directivo.
Los “baches” del camino
Pero no todo ha sido un camino fácil para la empresa. Cabe recordar que Coonatra también fue víctima de esa espiral de violencia que sacudió a Medellín desde finales de los 80s hasta bien entrada la década del 2000. La entidad ha sido víctima de robos y hasta atentados como la quema de automotores.
A esto hay que sumar los temas económicos pues tras pandemia la empresa no ha podido recuperar el volumen total de usuarios, que en 2019 eran unos 200.000 diarios; y la falta de inversión por parte del Estado.
“Coonatra tiene una historia pero también una experiencia para la ciudad que invita a trabajar de forma intermodal y articulada con el transporte masivo como es el Metro. Creo que la recompensa para todos estos años de servicio es que el Estado que nos ayude a hacer el servicio más eficiente para así traer más pasajeros. ¡Imagínese todo lo que haríamos con un carril exclusivo para buses. Infortundamente no tenemos respaldo porque los proyectos de inversión se van al transporte masivo que sí, es esencial, pero no llega hasta donde nosotros llegamos. El Metro o el Metroplús no se meten a los barrios donde toca hacer maromas para entrar y salir”, agregó.
Aún así , desde Coonatra dicen que seguirán buscando realizar importantes proyectos en pro de la movilidad, como cuando fueron la primera empresa que integró sus rutas a las estaciones del Metro Madera y Niquía o como cuando integraron a 114 buses los lectores de tarjeta cívica con beneficios en tiempo y seguridad para usuarios y transportadores.
Esta es la historia del “Circular Conozca”, una emblemática empresa que se metió en el corazón de los medellinenses y que ojalá su fama se extienda por otros 60 años más.