Exconcejal de Medellín fue suspendido por 12 meses por comentarios ultrajantes a sus compañeros
El disciplinado, identificado como Santiago Jaramillo Botero, violó los derechos fundamentales de otros corporados, entre ellos, el derecho a la honra, al buen nombre y a la dignidad humana.
La Procuraduría General de la Nación impuso una sanción de suspensión e inhabilidad especial por 12 meses al exconcejal Santiago Jaramillo Botero, quien ejerció funciones entre 2016 y 2019.
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La sanción responde a la conducta del exfuncionario, quien dirigió mensajes amenazantes, denigrantes e injuriosos a su compañero de corporación, Bernardo Alejandro Guerra Hoyos, a través de un grupo de WhatsApp integrado por los concejales de Medellín.
Según la investigación de la Procuraduría, Jaramillo Botero envió una serie de mensajes de texto y audio cargados de frases ofensivas y ultrajantes, entre las que destacó: “me encanta destruirte (...) a ti y a tu familia porque son corruptos (...) tonto tonto tonto TONTO TONTO, desde que exista te voy a matarrrr con esa tontería”, además de utilizar expresiones como “Bernie loca”, “corrupto” y “jeje, buenas noches partida de gonorreas, jeje”.
El disciplinado, al día siguiente, se disculpó formalmente durante la sesión ordinaria del Concejo, pero volvió a atacar a su colega, tildándolo de liderar una “empresa criminal” junto a su familia.
La Procuraduría evidenció que el comportamiento de Jaramillo Botero vulneró derechos fundamentales de su compañero, como la honra, el buen nombre y la dignidad humana, afectando gravemente su reputación pública. Las acciones fueron consideradas como una falta grave cometida con dolo, con la intención de causar daño.
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La sanción en primera instancia, que prohíbe a Jaramillo Botero el ejercicio de su cargo por un periodo de 12 meses, resalta la gravedad de la conducta y el impacto de los ataques verbales entre funcionarios públicos.