Un intento de homicidio destapó los abusos sexuales a menores de un estadounidense en Medellín

En julio de 2021, el docente estadounidense Michael Wayne Roberts salió del lugar donde se hospedaba, en el barrio Laureles, de Medellín, cuando dos personas le propinaron varias puñaladas que por poco le causan la muerte. La detención de los agresores le dio un giro al caso: las autoridades descubrieron que la agresión estaba relacionada con casos de abuso sexual en contra de menores de edad cometidos por el extranjero en la capital antioqueña.

EL COLOMBIANO conoció detalles del caso de este profesor de secundaria, de 41 años, que llevaron a que lo condenaran en su país a siete años de prisión por participar en conductas sexuales ilícitas en lugares extranjeros, sentencia emitida por el juez del distrito Oeste de Texas.

“Esta sentencia refleja que aquellos que se involucran en conducta sexual con menores, independientemente de donde ocurra, serán responsables de sus crímenes atroces y depredadores”, expresó el fiscal de ese distrito, Jaime Esparsa.

Roberts, quien dictaba clases a adolescentes entre los 12 y los 14 años en una escuela secundaria de Austin, Texas, vino durante la pandemia a Medellín. Entre diciembre de 2020 y junio de 2021 se contactó, mediante Facebook, con mujeres de las edades de sus estudiantes para citarse con ellas y darles dinero a cambio de satisfacer sus necesidades sexuales.

Una de las víctimas le relató a El Espectador: “Yo primero iba a hacer la limpieza del apartamento y después él me hizo la propuesta de tener sexo a cambio de dinero. Pensé en todas las necesidades que tenía en mi casa y accedí. Nunca había tenido relaciones sexuales antes y creí que, pues, sería algo normal”.

En los actos sexuales solía cometer agresiones, de manera física y verbal, situación que sería el origen del ataque en su contra, de acuerdo con las investigaciones de la Dirección de Protección y Servicios Especiales (Dipro) de la Policía Nacional, que inició este proceso luego de obtener el testimonio de dos de las víctimas de este extranjero, las mismas que estarían detrás del atentado.

Por el ataque que lo tuvo entre la vida y la muerte, a Roberts lo trasladaron en un vuelo humanitario a Austin para que se terminara de recuperar. Debido a que el proceso en Colombia ya estaba en curso y los delitos cometidos son transnacionales, la Dipro se contactó con personal del Departamento de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) de Estados Unidos, en una indagación en la que también participó la ONG Operation Underground Railroad (OUR), que acompaña a las víctimas de delitos sexuales contra menores de edad.

Con estas dos víctimas, que fueron aprehendidas y se encuentran en proceso de restablecimiento de derechos, se hicieron las indagaciones. Según la Dipro, encontraron una tercera víctima que denunció y a otras dos que prefirieron no hacerlo.

Operativo de captura

La recolección de evidencias de la Policía Nacional y la HSI permitieron que el 15 de septiembre del año pasado, las autoridades de ambos países llegaran hasta la vivienda del docente, en la localidad de Round Rock, ubicada a 40 minutos por carretera de Austin. La orden de captura fue emitida por un gran jurado federal el 6 de septiembre.

La captura la hicieron en presencia de su hija, de 12 años, en cuya habitación las autoridades encontraron algunos juguetes sexuales, por lo que se inició un proceso investigativo adicional. Sin embargo, señalaron las fuentes judiciales, esta menor de edad no fue víctima de ningún delito sexual. Tampoco se tiene reporte de algún hecho que afectara a sus estudiantes en Estados Unidos.

En medio de las investigaciones iniciales por la tentativa de homicidio en Laureles, la Policía encontró el celular de Roberts, el cual quedó bajo custodia policial. Al conocerse los móviles del ataque, se ordenó un análisis forense al equipo y allí se encontraron algunas imágenes de menores de edad desnudos, por lo que está cursando un proceso en su contra por pornografía infantil.

Visitante frecuente

Aunque las denuncias se presentaron en un periodo de seis meses, Roberts era un visitante frecuente a Colombia, tanto que ya contaba con cédula de extranjería.

Los registros de Migración Colombia contabilizan 79 ingresos y salidas al país desde junio de 2008. Antes de 2020 no se tuvo conocimiento de que hubiera cometido algún delito en el país.

Roberts se declaró culpable de los delitos imputados en febrero de este año y, además de los siete años de prisión, fue condenado a otros 10 años con libertad condicional. También tendrá que pagar 147.844,51 dólares (670 millones de pesos) y será incluido en la lista de ofensores sexuales de los Estados Unidos.

Desde la Dipro señalaron que este no es el único procedimiento en curso en contra de estadounidenses que han cometido delitos sexuales en Colombia y en próximos días podrían salir nuevas condenas.

Adicionalmente, el organismo policial, en conjunto con OUR, piden a las mujeres víctimas de vulneraciones sexuales por parte de estadounidenses que los contacten, bien sea por los medios de comunicación de la Dipro o a través de una nota en el sitio ourrescue.org.

Todo esto en medio de las múltiples problemáticas que se vienen generando por cuenta del aumento de turistas en Medellín, muchos de los que vienen detrás del ambiente de rumbas, drogas y sexo.