Un montaje de dimensiones gigantescas
PARA LA INAUGURACIÓN de los Juegos Suramericanos se requiere desmontar la gramilla del Atanasio. Las mallas también serán retiradas. Una labor que no se hace de la noche a la mañana como piensan muchos.
Genari Magrands fue el encargado de acabar con los dimes y diretes de la inauguración de los novenos Juegos Suramericanos.
Final a las especulaciones, de comentarios y críticas aventuradas: el lunes se iniciará la levantada de la gramilla del estadio Atanasio Girardot de Medellín.
Quien figura como cabeza de la empresa Culture Fit, encargada de montar el espectáculo de apertura del certamen, mostró las dimensiones de lo que se necesita en el principal epicentro deportivo de la ciudad.
"Al Atanasio Girardot lo convertiremos en un escenario de más de 10 mil metros cuadrados. Utilizaremos 150 mil kilos de material para la adecuación del espacio escénico. Conseguiremos una explosión de luz y sonido, gracias a los 150 mil vatios de sonido y más de un millón de vatios de iluminación", anunció el empresario español que fue claro en su exposición.
El cronograma de trabajos, que se redujo en varios días, porque estaba planteado, en comienzo, que sería el 25 de febrero la fecha límite para acometer la obra en el estadio. Ahora, comenzará el 1° de marzo.
Serán cinco días para levantar la gramilla. El 6 de marzo será otra fecha de corte, con motivo del levantamiento de mallas, porterías y otros detalles.
El 12 de marzo se cumplirá el primero de los ensayos generales que son tres días de show previo porque, como los jugadores de fútbol, ellos también deben amoldarse al escenario donde harán su presentación.
"Nos comprometimos con 19 días de trabajo para cumplirle a Medellín y a la inauguración", acotó el culto Magrands, quien ha recibido muchas voces de aliento en la capital paisa, con motivo de las ceremonias de apertura y clausura de los Juegos.
Sobre la grama que se levantará en el Atanasio Girardot, será llevada a la cancha Marte y al estadio Cincuentenario, donde será sometida a un proceso de mantenimiento mientras se vuelve a poner, a partir del 20 de marzo.
Y, a diferencia de lo que sucede normalmente con estos eventos del ciclo olímpico que exigen inauguración y clausura en el mismo escenario, en esta ocasión, se hicieron gestiones ante la Organización Deportiva Suramericana -Odesur- para que la fiesta de cierre no fuera en el Atanasio.
"Hacer la clausura en la calle San Juan, es precisamente para darle tiempo a la postura de la gramilla, después del acto inaugural. Esto se había contemplado para ayudarle a los equipos de fútbol de Antioquia", agregó la directora de los Juegos, Alicia Vargas Restrepo, quien tuvo a su lado al alcalde encargado, al arquitecto Mauricio Valencia, quien dejó en claro todo lo realizado por la Alcaldía alrededor del tema de los Juegos.
"Con la debida anticipación se firmaron contratos de no utilización del estadio. Esta es una decisión institucional. Frente al DIM y al Nacional hemos sido absolutamente responsables", advirtió el alcalde encargado, quien a renglón seguido que "con lo del estadio no buscamos conflictos. Tenemos que juntarnos todos".
De esta forma todo queda claro y expuesto, sin misterios, como para que quienes especularon a más no poder con el tema tengan claro las dimensiones de lo que se hará en el estadio Atanasio Girardot a partir del lunes. Así, pues, Genari puso los puntos sobre las íes.