Histórico

Un año habitando la Morada

El 6 de abril se celebró el primer año de existencia de Morada, un lugar ubicado en San Javier, donde desde el arte y sus manifestaciones, se piensa y construye ciudad.

08 de abril de 2013

Desde hace un año, un grupo de soñadores que buscan la transformación cultural de Medellín, se reúnen en una casa de la comuna 13 para perseguir un objetivo concreto: despertar en la ciudad la capacidad de amar.

Morada, nombre que recibe el lugar ubicado cerca de la estación San Javier del metro, es un espacio que la comunidad califica como mágico. Allí, la única consigna, tanto de sus habitantes como de quienes visitan la casa, es "dejarse habitar, dejarse morar y trabajar por la transformación de la ciudad".

Para Lucas Jaramillo, uno de los líderes de este proyecto, Morada es un lugar para pensar a Medellín y expresarse a través de diferentes ejes.

"Aquí venimos a crear. Desde la libertad del hacer queremos sentar una posición crítica hacia una ciudad que despierta amores y odios".

Desde este lugar, pensado como un espacio de encuentro colectivo, se emiten 30 programas radiales que hacen parte de una emisora en línea (Morada.co), uno de los 10 frentes que cubre el proyecto.

"Son varias las actividades que realizamos. Destacamos las clases de graffitti, pintura, dibujo, formación musical, agroarte, programación e investigación en periodismo. Además de la emisora, que es un espacio para la libre expresión", dice Lucas.

Gerardo Pérez, director de la Fundación Casa de las Estrategias, uno de los proyectos que junto a Parcharte también habitan la casa, destaca que Morada vive del trueque y del voluntariado, del cual participan unas 80 personas.

En la celebración de su primer año de trabajo, la comunidad destacó algo en lo que morada siempre ha insistido: el amor, mandato que desde distintos quehaceres quieren promover entre la ciudadanía.