Histórico

Maturana es el indicado para recuperar el estilo

EL EX DIRECTIVO del fútbol Samuel Calderón analiza el posible nombramiento del ex entrenador de la Selección Colombia para hacerse al nuevo cargo de director general de fútbol y de selecciones nacionales.

25 de febrero de 2010

Director de desarrollo o secretario técnico de la Federación Colombiana de Fútbol. La actividad profesional de Maturana es bien conocida por el país, con resultados importantes y visibles, pero hay otro aspecto que es aún más trascendente y pasa desapercibido para la gran mayoría.




El fútbol profesional colombiano acaba de cumplir 61 años. Desde los primeros años, que coinciden con la época llamada de El Dorado, la mayoría de equipos se armaron con jugadores extranjeros en las posiciones básicas (arquero, defensa central, centro medio y centro delantero), complementados por jugadores colombianos.




A Colombia llegaron principalmente jugadores argentinos a Millonarios, Santa Fe, Medellín, América, Cali, Deportes Caldas, Once Deportivo, Bucaramanga, Quindio, uruguayos al Cúcuta,  brasileños al Junior y al Sporting de Barranquilla, paraguayos al Pereira y al Boca Junior de Cali, peruanos al Deportivo Cali, costarricenses a Universidad de Bogotá y al Medellín y unos pocos ingleses al Santa Fe. El único equipo que no incorporó extranjeros fue el Municipal de Medellín, convertido luego en el Atlético Nacional.




En cada club predominó el estilo de los extranjeros que hacían mayoría y eso a su vez influyó en el desarrollo del fútbol de las ciudades y departamentos al que pertenecían los equipos. El elemento nacional asimiló las características principales de cada estilo y se convirtió en muy buen complemento de los extranjeros, pero con contadas excepciones no ocuparon las posiciones de la que en aquel momento se conocía como la columna vertebral del equipo.




Este hecho les dio versatilidad para acomodarse al estilo predominante, lo cual a la larga fue ventaja y desventaja, porque a nivel de equipo profesional les significó una fácil adaptación, pero a nivel de selección nacional se tradujo en carencia de estilo propio, que se traducía al momento de la competencia en equipos con pasajes de fútbol vistoso, acompañados de períodos de desconcierto, en los que se perdía la brújula, el control de los partidos y las posibilidades de triunfo.




Así estuvimos por casi cuarenta años, hasta que en 1985 Luis Alfonso Marroquín formó una selección juvenil que participó en el Suramericano de Asunción con gran éxito, solo igualado por la selección que en 1964 jugó el preolímpico realizado en Colombia.




Con varios de los jugadores de la selección de Marroquín, Francisco Maturana pudo conformar un grupo enteramente criollo en Atlético Nacional y con el valioso apoyo de Hugo Gallego y Hernán Darío Gómez, realizar un gran trabajo que se tradujo en un equipo que fue orgullo e imagen de Colombia y llevó a su técnico al manejo de la Selección.




Esa Selección, formada con la base de Nacional y complementada por jugadores como Carlos Valderrama y Freddy Rincón, le permitió a Maturana darle por primera vez a una Selección Colombia de mayores un estilo propio, que le representó el tercer puesto en la Copa América de Argentina 87, ser declarada la selección revelación del torneo y la elección del “Pibe” Valderrama como el mejor jugador de América en el mismo año.




En la continuación del proceso iniciado a nivel de selección en esa Copa América, Maturana logró la clasificación al Mundial del 90 en Italia y el fútbol colombiano empezó a ser reconocido y respetado a nivel mundial.




Con el estilo impuesto por Maturana, acorde con las características del jugador colombiano y apoyado en la gran condición de quienes integraron esa selección, pero principalmente en la gran personalidad y capacidad de liderazgo del Pibe, la magnífica complementación de Freddy Rincón y el gran respaldo en la contención de Leonel Alvarez, Colombia impuso un fútbol de toque, aparentemente intrascendente pero suficientemente efectivo para enfrentar con muy buen nivel a grandes selecciones, dar alegría a Colombia, ser clasificada en lugares de privilegio por la FIFA y merecer el elogio de periodistas y aficionados de todo el mundo.




Esa definición de estilo de juego para una selección que no lo había tenido, es el mayor éxito y aporte de Francisco Maturana al fútbol de nuestro país, por encima de los campeonatos y subcampeonatos que haya logrado con Nacional, de la primera Copa Libertadores ganada por un equipo colombiano y aún de la Copa América obtenida por él en el 2001, único campeonato alcanzado por Colombia en la máxima categoría en toda su historia.




Y digo esto porque el factor primordial en fútbol, el que permite alcanzar logros y títulos,  promover nuevas figuras, dar satisfacciones y alegrías al país, es precisamente el estilo o modalidad de juego de un equipo, sea este una selección, un club profesional o un club aficionado.




Para corroborar lo anterior quiero agregar que el señor Luis Aragonés, anterior técnico de la selección de España, impuso hace un poco mas de dos años a su selección un estilo similar al de Maturana con Colombia en el 87 y con ese estilo, del que carecía también su país, fue campeón de Europa, alcanzó un record de 32 partidos consecutivos ganados y ocupa desde la obtención del título hasta la fecha el primer lugar en el ranking FIFA de selecciones.




El Valderrama de España se llama Xavi Hernández, el Rincón, Andrés Iniesta y el Alvarez se llama allí Xavi Alonso. Jugadores como estos hacen fácil el fútbol, conducen el equipo, lo calman, lo regulan, le dan sorpresa, manejan sus cambios de velocidad, asisten a su línea defensiva, explotan a sus mejores hombres y marcan la diferencia, amplia o estrecha, que la mayoría de las veces les da la victoria. Además disfrutan, juegan al fútbol y hacen disfrutar a sus seguidores.




El Leonel Messi de Barcelona es el mismo Messi de la selección Argentina, pero su rendimiento se multiplica en su club por la seguridad y complemento que encuentra en un estilo que es similar al de España, el mismo que aquí tuvimos. Razón tenía Hugo Gallego cuando recientemente dijo en una declaración de prensa: “Estamos buscando un sistema que se descubrió para Colombia hace 22 años”.




Quiero concluir diciendo que estoy totalmente de acuerdo con la designación de Francisco Maturana como Técnico en Desarrollo de Colombia, para que con la gran experiencia que adquirió dirigiendo y la que haya acumulado en los últimos años como miembro del comité técnico de la FIFA, pase a ser el director General de Fútbol y de Selecciones de Colombia, puesto desde donde puede hacerle mucho bien a nuestro fútbol y devolverle, como él mismo dice, “algo de lo mucho que del fútbol he recibido”.




Y para ser coherentes con este paso y con las disposiciones de la FIFA en ese sentido, deberíamos establecer la misma función en nuestros clubes profesionales de primera y segunda división, para que de aquí en adelante exista en cada institución un punto de referencia confiable y estable en materia deportiva, que sea el nexo entre la parte técnica y la parte directiva y le de a esta el norte que con frecuencia falta.

*Ex dirigente del fútbol