Juan Pablo los tenía estudiados
EL COLOMBIANO LOGRÓ una de las dos medallas de oro para el país en el tercer día del atletismo. Estudiante en Puerto Rico, se unió al festejo de la posta corta de varones, quienes también cruzaron primeros. El atletismo nacional continuó dando sorpresas en este torneo.
Los tres años quemándose las pestañas en el escritorio también le sirvieron en la pista. A Juan Pablo Maturana, el estudio le sirvió para ganar el oro.
Juan Pablo, un morocho de arete en la oreja derecha y topito en la izquierda, ganó los 400 metros con vallas de los Juegos Suramericanos, porque, según él, además de meterle duro a las piernas también le echó cabeza a la carrera.
"Yo los tenía estudiados, sabía que tenía que llegar a los últimos 100 por delante del brasileño. Ellos son fuertes, como el venezolano, pero yo me tenía la confianza", dice Maturana, nacido hace 22 años en La Paila, Valle del Cauca, pueblo al que le dedicó el triunfo y el oro que hoy brilla en su pecho.
En Brasil, tierra de sus rivales, Juan Pablo despuntó en 2007, a tal punto que le llamó la atención la universidad de Turabo en Puerto Rico, allá donde hay una veintena de colombianos que se ganan la vida y los libros con los spikes puestos.
"Llevo siete semestres de Administración de Empresas y cuando termine voy a hacer una maestría en Gerencia. Estar en la universidad te ayuda a pensar, es una oportunidad que me da el atletismo y no quiero dejar perderla", anotó Juan Pablo, escoltado en la meta por el venezolano Geormi Jaramillo y el también colombiano Brayan Ambuila. Un triunfo con piernas y cerebro.