Histórico

En seis años, el Chocó tendría energía 24 horas

El Ipse y la Gobernación determinaron una estrategia con la que buscan llevar energía a 10 municipios chocoanos, en seis años. En dos meses revisarán compromisos.

12 de junio de 2013

Tras una vida de "oscuridad" y coincidencialmente luego de una protesta que paralizó a Acandí durante varios días por falta de energía, el Instituto de Planificación y Promoción de Soluciones Energéticas para las zonas no interconectadas, Ipse, llegó a ocho compromisos con la Gobernación, con el fin de electrificar a 10 cabeceras municipales de Chocó en un plazo de seis años.

La propuesta del Ipse está centrada en avanzar en la interconexión eléctrica, pero también en aprovechar el potencial hídrico, de biomasa y solar del departamento. Por esa razón se comenzarán a estructurar proyectos no solo de interconexión sino que también están promoviendo pequeñas centrales hidroeléctricas.

Edwin Mejía Morales, subdirector de Planificación Energética de Ipse, destacó que es la primera vez que se sientan todos los responsables a buscar una solución para llevar energía a las cabeceras municipales. "Los alcaldes deben entender que la solución no son las plantas eléctricas. Ahora, tenemos claro para dónde vamos. Le logramos poner un norte energético al departamento", indicó.

¿Cuáles son los proyectos con los que esperan llevarle energía al Chocó?

Mejía Morales explicó que se llegó a ocho compromisos, los cuales en dos meses se volverán a revisar para precisar cifras, definir fechas y así comenzar a asignar recursos.

Los proyectos son: una línea de interconexión que le dará servicio a El Tigre-Unguía-Acandí con un costo cercano a los 45.000 millones de pesos. La línea Quibdó-Vete con un costo de aproximadamente 18.000 millones de pesos. Otra línea que conectará a Pizarro con Sipí con un costo cercano a 20.000 millones de pesos y la línea de interconexión Malaguita-Docordó.

También son materia de revisión las pequeñas centrales hidroeléctricas para los municipios de Bojayá y Vigía del Fuerte (Antioquia), con un valor estimado entre 7.000 y 10.000 millones de pesos, al igual que otra pequeña central para Nuquí con un costo de alrededor de 12.000 millones de pesos. Frente a la construcción de estas pequeñas centrales sostuvo que es una idea nueva, ya que descubrieron que son mucho más rentables que la interconexión.

"Tenemos un horizonte de seis años para desarrollar este proyecto, todo depende de si los recursos se asignan rápidamente debido a que hay unas variables externas que impactan estos proyectos, como la aprobación de los recursos de las regalías y lo otro es que todos estos proyectos necesitan consultas previas y hay unos territorios indígenas que son muy complejos".

Destacó que estos compromisos no son nuevos y tampoco surgieron por el paro en Acandí. "Estaban en la agenda. Hay un plan que también tenemos para Nariño, en el que estamos definiendo un norte energético para las comunidades de la frontera con Ecuador".