Televisión

El realismo mágico de Gabriel García Márquez inspiró el programa ¡Oye, Arnold!

A once años de su muerte, Gabriel García Márquez sigue inspirando. Su realismo mágico influyó directamente en la serie animada que marcó a toda una generación entre 1996 y 2004.

Periodista de la Universidad Pontificia Bolivariana. El sueño de ser médica lo cumplí haciendo periodismo de salud. También escribo sobre ciencia y de vez en cuando cultura.

18 de abril de 2025

La relación no es sencilla a simple vista. El autor de Cien años de soledad y El amor en los tiempos del cólera es considerado uno de los grandes pilares de la literatura latinoamericana del siglo XX, junto a figuras como Julio Cortázar (Argentina), Mario Vargas Llosa (Perú) y Carlos Fuentes (México) y este 17 de abril se conmemoraron once años del fallecimiento de Gabriel García Márquez, el Nobel colombiano cuya obra sigue marcando generaciones.

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Lo sorprendente es que su influencia trascendió la literatura para instalarse en el universo animado. Craig Bartlett, creador de Hey Arnold!, la recordada serie emitida por Nickelodeon entre 1996 y 2004, confesó que fue precisamente la pluma de Gabo la que ayudó a moldear su mundo animado.

En entrevista con la empresa de medios Great Big Story, Bartlett reveló: “Quería capturar la poesía de lo cotidiano, algo que García Márquez hacía con maestría. En ¡Oye, Arnold! intentamos recrear esa sensación de que lo mágico no está separado de lo real, sino que convive con él”, comentó el animador.

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La influencia del realismo mágico se refleja en elementos como el diseño del barrio ficticio de Hillwood, donde vive Arnold, el entrañable ático en el que duerme, y episodios como Hombre Paloma, que mezclan fantasía y ternura con una sensibilidad única.“Estábamos leyendo ambas obras (Cien años de soledad y El amor en los tiempos del cólera), y fueron grandes influencias para nosotros, porque el realismo mágico es el género de escritura de García Márquez. Yo quería ese realismo mágico en la casa de Arnold y en su vecindario”, añadió Bartlett.

Además de García Márquez, Bartlett también encontró inspiración en la figura de Frida Kahlo. En 2017, compartió en su cuenta de Instagram una fotografía de la pintora mexicana a los once años, tomada por su padre en 1919.

En la imagen, Frida aparece con un moño grande, vestido y cejas prominentes, rasgos similares a los de Helga Pataky, personaje complejo que oscilaba entre el acoso y el amor por Arnold.

“Ella es muy poderosa y vulnerable, llena de contradicciones”, dijo Bartlett sobre Helga y Frida.

La música también es protagonista en esta serie animada. Bartlett explicó que desde el inicio supo que el jazz era el sonido perfecto para ambientar su historia. Por eso, el compositor Jim Lang creó piezas inspiradas en leyendas del género como Thelonious Monk, Herbie Hancock y Miles Davis.

“Desde el inicio supe que ¡Oye, Arnold! necesitaba jazz”, señaló Bartlett en la entrevista.

Aunque fue concebida como una serie para niños, la producción audiovisual tocó temas profundos como la inmigración, la pobreza, la pérdida y la memoria colectiva. Su mezcla de realismo mágico, sensibilidad social y arte sonoro la convirtió en una de las joyas animadas de los años 90 y 2000.

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En Colombia y otros países de Latinoamérica, se transmitió a través del canal Nickelodeon. La serie debutó el 7 de octubre de 1996 y finalizó el 8 de junio de 2004, pero el eco de sus historias —y de García Márquez en ellas— sigue vigente.