Con velocidad, Yanelle derrotó los prejuicios
Dice que lograr la marca olímpica es complicado, pero que si ya logró lo más difícil, todo es posible. Séptima este sábado.
Periodista del área de Deportes
Mientras hacía los estiramientos en la pista sus piernas y manos le temblaban. No por llevar diez años sin pisar un escenario para competir en Colombia, sino porque regresaba a la acción como Yanelle y no como Vladimir, el nombre que “ya hace parte del pasado”.
En cada pausa que realizaba tras algunos trotes suaves en el espacio de entrenamiento del estadio Alfonso Galvis, se le veía ansiosa.
De gorra negra para proteger su rostro del intenso sol que cobijó la mañana de ayer en Medellín, pasaba inadvertida para los aficionados, mas no para las rivales. Algunas de ellas, como Yenifer Padilla, la saludaron de beso y le desearon buena suerte.
De reojo miraba las carreras de otras participantes, pero también inclinaba su cabeza hacia el reloj Cassio que tenía puesto en su mano derecha.
“Es que este día lo he esperado por años. Estoy emocionada, pero también nerviosa, no veo la hora de correr”, indicaba Yanelle del Mar Zape, la primera transexual en la historia de Colombia que debutó en una certamen deportivo oficial.
En el Nacional de atletismo que comenzó ayer en la capital paisa, la velocista, que en su “vida anterior” corría la modalidad de vallas masculina, se sintió como una bebé cuando da sus primeros pasos.
-¿Qué edad tiene?
“Esa pregunta no se le hace a una mujer”, respondió con una sonrisa antes de empezar a desfilar rumbo al carril dos, donde comenzaría su nuevo desafío como atleta, ahora en 100 metros planos.
Los gritos de aliento del público le sirvieron para dejar la tensión a un lado.
Aunque las prendas blanco y verde de Antioquia, departamento que le dio la oportunidad de competir, no hacían juego con sus spikes morados y rosados que llevaba puestos, su rostro de felicidad sí generó gusto y admiración entre los asistentes al lugar.
En la línea de partida, tras una primera salida en falso, no se desesperó. Y luego de un nuevo pistoletazo de arranque se le vio tan veloz que alcanzó a ser segunda, pero en la mitad de la carrera se fue quedando en el camino para cruzar la meta en la séptima posición -12,54 segundos- de su serie.
Camino al sitio de partida para recoger sus pertenencias, los aplausos para ella no se hicieron esperar.
En la tribuna, la entrenadora Zuleima Araméndiz no paraba de mencionar su nombre, y con el dedo pulgar le daba a entender la alegría por su actuación. En un costado de la pista, el orientador Léisner Aragón la felicitó con un choque de manos.
“Estoy feliz, porque por fin se dio el primer paso. Ya logré sacar la presión que tenía encima. Amo el deporte, el atletismo, y que me dieran esta oportunidad es todo un premio”, relató Yanelle mientras recuperaba el oxígeno después de la exigencia.
La chilena Isodora Jiménez, quien ganó esa serie -11,34- se sorprendió al ser indagada sobre lo que significaba para ella correr con una atleta transexual.
“¿Con quién? Ni sabía que es así. Es de admirar lo que hace”, expresó.
Evelyn Rivera, la reina nacional de la velocidad, también la elogió. “Es un ejemplo de superación, me alegra que las metas que se trazó las empiece a cumplir”.
Isidro Montoya, otro especialista de esta modalidad en Colombia, manifestó que para él, Yanelle “es una guerrera, porque después de hacer ese cambio y volver a competir a este nivel no lo hace cualquiera. Empieza de cero”.
Palabras que reconfortan e ilusionan más a Yanelle para seguir corriendo por sus objetivos, entre ellos clasificar a los Juegos Olímpicos. “Será complicado, pero ya hice lo más difícil”, confesó la primera atleta transexual de Colombia que ayer brilló como los aretes de plata que tenía en sus orejas.