Chiquitines se dieron “leña” en el circuito rutero

A doña Amparo Usma Cano no le interesaba si al hacer la sumatoria de las mangas (series) en el Festival del Babyciclismo su nieto Matías Molina Colorado, de ocho años, quedaba campeón. Ella ya lo vio cruzar primero la meta en una de esas series y eso es lo importante, así haya terminado 18 en la general.

A esta abuela, orgullosa y principal fan de su nieto, ayer en el circuito interno del estadio Atanasio Girardot, la voz le retumbaba cuando Matías asomaba en el horizonte.

“Respire, no pare, siga pedaleando, ya casi Mati, ya casi termina, va muy bien”, le gritaba y el niño tomaba ese nuevo aire para pedalear más duro y cumplir con las ocho vueltas del circuito.

El remate de la competencia fue espectacular, con Matías que embaló y dejó a sus rivales rezagados. Ella se lanzó sobre él para felicitarlo.

“Excelente mijo, excelente, lo hizo muy bien”, le dijo al niño que terminó exhausto, pero feliz de vivir su primera experiencia en el Festival de Festivales en Medellín.

De regreso a Amagá

Con la satisfacción del deber cumplido, Matías y doña Amparo empacaron la cicla y se fueron a la terminal a buscar un transporte que los llevara hasta Amagá, donde viven.

El niño, entrenando en el club Mineros que es dirigido por Benur Zapata, cursó el año pasado el tercer grado en el colegio Alejandro Toro.

Confiesa que antes de ingresar al ciclismo jugó fútbol y aunque era delantero y hacía goles, las ruedas fueron las que ganaron el pulso.

Doña Amparo, por su lado, tiene claro que ya sea en el ciclismo o en el deporte que su nieto escoja lo seguirá apoyando, pues cree que es una forma de inculcarle disciplina y responsabilidad desde pequeño, y de “alejarlo de cosas malas”. Ella quiere que él sea un hombre de bien.

Contrario a lo que se pudiera pensar, Matías no tiene un ciclista como referente, pero sí está claro que quiere seguir en este deporte, pues le apasiona el tema de pedalear por donde sea.

Finalmente, en la sumatoria de las series, terminó en la casilla 18 de la ruta del Babyciclismo en la categoría escolar que ganó Jairo Estiven García, de Cundinamarca.

Su propósito desde ya es seguir entrenando, porque el próximo año quiere regresar para buscar el título que en esta oportunidad se le escapó.

No ganó, pero se va feliz por la experiencia que vivió y con la tranquilidad de tener a su lado a su fan número uno, y su principal motivadora, doña Amparo.