Fútbol

Cazatalentos, los “ojos mágicos” que tienen Nacional y Medellín

Este es el rol que cumplen los veedores de jugadores en los clubes profesionales.

Comunicador social periodista de la U. de A. Sigo el fútbol profesional y aficionado, la gimnasia, el voleibol y las otras disciplinas del ciclo olímpico. Redactor de El Colombiano

19 de agosto de 2021

En los procesos del fútbol formativo, considerado por muchos el “departamento de producción” de los clubes profesionales, hay una labor que alcanza relevancia, la de los seleccionadores de talentos o scout.

El “ojo mágico” de estos personajes en ligas exportadoras de jugadores, como la colombiana, tiene tanta importancia que en momentos de crisis permite la estabilidad económica de los equipos.

Un ejemplo reciente se ha vivido en Atlético Nacional, que este año tuvo que pagar demandas millonarias por los casos de Marlos Moreno y Fernando Uribe, la última por 5 millones de dólares.

Las ventas de los pases de sus jóvenes zagueros Andrés Reyes, al New York Red Buls de la MLS; y Yerson Mosquera, al Wolverhampton de Inglaterra, dos futbolistas que llegaron a la institución por medio de las veedurías, evitaron que la afectación financiera hubiese sido mayor.

Trabajo silencioso

El cazatalentos de Nacional desde hace cinco años es Juan Camilo Pérez, quien antes de llegar allí fue director técnico de las selecciones de Antioquia y Colombia en todas las categorías menores.

A Reyes lo descubrió en Puerto Tejada y a Mosquera, en Urabá. A ellos se suman prospectos como Cristian Castro, Johan Hinestroza, Nelson Palacios, Jímer Fory y Juan David Cabal que hacen su proceso en el conjunto paisa, y otros que están a préstamo en otros equipos: Brayan Lemus, Ewil Murillo, Jean Franco Peña, Dilan Ortiz, Sebastián Yabur, Jhon Valencia y Jesús Zabala.

Pérez asegura que actualmente tienen el foco de atención en la zona de Urabá, Medellín y otros municipios antioqueños, sin descartar opciones en distintos departamentos.

En relación con su trabajo cuenta que este le da la posibilidad de conocer muchos equipos y regiones, “clubes, culturas, costumbres y aprender de las características de cada zona del país”.

El contacto con la comunidad futbolera y poderles ayudar a muchos jóvenes a cumplir sus sueños de llegar a una institución reconocida como es Nacional, son otro argumentos que lo motivan.

Sobre las características de un buen seleccionador de talentos, Pérez dice que este “debe tener sensibilidad social para ayudarle a la gente, experiencia y un ojo entrenado para saber cuáles jugadores poseen condiciones para proyectarse no solo en el balompié local, sino internacional”.

Según Juan Camilo Pérez, otros clubes colombianos que le apuestan e invierten fuerte en esta estrategia son Junior, Cali, Tolima, Millonarios, Cortuluá y Tolima.

Jesús Ramírez, exdirector deportivo de la Liga Antioqueña de Fútbol y fundador del club aficionado Estudiantil, en el que cumple esta labor, asegura que como dice el argentino Marcelo Bielsa, escoger a los deportistas que sobresalen es fácil, “la clave está en saber identificar qué joven tiene aptitudes que puede desarrollar a mediano y largo plazo, y que para el común de la gente pasan advertidas”. Y agrega que en este campo hay mucho por mejorar en el país.

En su misión, Ramírez detectó en el pasado a Róger Martínez, Andrés Ricaurte, Géiller Góez y Sebastián Peñaloza, entre otros.

El DIM le encomendó esta tarea a Luis Alfredo Altamar hace 4 años y también tiene su lista para exhibir. En ella aparece Edwin Mosquera, hoy en el fútbol de Brasil; y Yesid Díaz y José Estupiñán que ya debutaron el primera división. Dice que “es una misión apasionante” que lo lleva por todo el país