“Se espera un fútbol muy rápido, pero
de poco pensar”
Luis Alfonso Fajardo confía que la afición podrá disfrutar de un buen mundial y avizora que será muy disputado.
De niño soñé ser periodista deportivo. Soy sonsoneño, especialista en comunicación y un apasionado de mi profesión.
El exfutbolista Luis Alfonso Fajardo, más conocido por la afición como “Bendito”, es uno de los colombianos que ha tenido la oportunidad de representar al país en un Mundial.
El habilidoso mediocampista hizo parte del grupo que dirigía Francisco Maturana, que clasificó al Mundial de Italia 90, donde el equipo avanzó hasta los octavos de final, fase en la que cayó (2-1) frente a Camerún.
Fajardo recordó en diálogo con EL COLOMBIANO las vivencias que le dejó esta competencia y contó cómo avizora la Copa Mundo de Qatar.
¿Qué espera del próximo Mundial?
“Se pronostica un mundial muy rápido, muy generoso en el esfuerzo, pero de muy poco pensar. Seguramente el ritmo será acelerado y esperamos que tengamos la satisfacción de ver buen fútbol”.
¿Tiene Suramérica con qué recobrar su protagonismo?
“Sí, me parece que el nivel que muestra Argentina es bastante alto, igual Brasil. Ambos son candidatos para pelear el título. La competencia entre nuestro continente y Europa será muy buena”.
¿A qué selecciones ve cómo favoritas?
“Confío en que las mencionadas selecciones de nuestro continente van a ser protagonistas, como seguramente también buscarán hacerlo las potencias del viejo continente. Me gusta Alemania, Bélgica, y Francia también tiene un muy buen equipo. Me parece que va a ser un mundial muy competitivo”.
¿De cuáles jugadores espera un mayor protagonismo?
“Hay jugadores de élite que vienen en un descenso en su nivel deportivo, como Lionel Messi, otros de sus compañeros de Argentina y muchos no están en su mejor momento”.
¿En qué han cambiado las cosas, por qué Colombia está por fuera del Mundial?
“En esa época dejamos el listón muy alto, todos nos entregábamos por la Selección, se clasificó a varios mundiales consecutivos, una lástima que no hayamos podido lograr el cupo para Qatar”.
¿Qué es lo que más recuerda de Italia 90?
“Fue el culminar de una ilusión. La aspiración de todo futbolista es participar en un mundial de fútbol. Y yo tuve esa linda oportunidad, gracias a una gran Copa Libertadores que hicimos en 1989, que nos dio ese aval para llegar a ese certamen”.
¿Ese juego con Alemania quedó en la memoria?
“Estuvimos a la altura de un campeón del mundo como Alemania. Ese partido lo jugamos mano a mano y entendimos, tras ese compromiso lo que era el nivel del fútbol colombiano. Eso nos puso en la palestra y eso se valoró, pues a partir de ese momento empezó el éxodo de colombianos al balompié internacional”.
¿Ese Mundial dejó la sensación de que se pudo llegar más lejos?
“Nosotros jugamos el certamen a un muy alto nivel. Contra Camerún nosotros fuimos muy superiores, pero no logramos conectar con el arco, eso fue lo que nos eliminó de ese Mundial”.
El grupo que esa época siempre se catalogó como una familia
“En el fútbol todos los equipos triunfadores, es lo primero que configuran siempre, una gran familia. Los alemanes dicen que en su momento lograron varios títulos debido a que ellos no tienen figuras, que todos luchan por un mismo objetivo y a la postre, eso fuimos nosotros. Es así como logran esos niveles competitivos tan altos”.
¿En esa familia cuál era el papel de Francisco Maturana?
“Pacho era un padre exigente. Cuando hablaba había que escucharlo porque era muy sabio en sus palabras, por eso había que prestarle siempre mucha atención. Eso fue fundamental en todo este proceso, porque él como técnico nos enseñó una cantidad de valores y la confianza para poder llegar a eso”.
¿Qué otros roles se destacaron en ese grupo?
“Andrés (Escobar), que en paz descanse mi muchacho, era el que más jocoso, todo el día estaba contento, todo el día estaba molestando. Había también unos muy juiciosos como León Villa y otros tantos que eran muy juguetones con el balón. Era un grupo muy afín con todas las situaciones futbolísticas y creo que eso nos ayudó bastante”.
¿Y en esa familia “Bendito” Fajardo qué rol cumplía?
“A mí me gustaba mucho reunirlos a todos, fomentar la unión. Me gustaba visitar mucho la habitación de los compañeros, para saludarlos, molestarlos”.
¿Cómo se debe preparar un futbolista de cara a un Mundial?
“Es un torneo de la más alta exigencia, por eso desde las prácticas hay que esforzarse y trabajar duro en pos de llegar a la competencia en un alto nivel. Desde días antes su pensamiento y en general todo, debe girar de cara a este evento”.