Épica remontada de Carlos Alcaraz para ser el rey de Londres
Cuando coronó su hazaña, Carlos Alcaraz, el niño prodigio del tenis, se tiró al piso, se llevó las manos a la cara, empuñó sus manos y festejó mirando el cielo londinense. El sueño de ser el rey de Wimbledon se había cumplido ante un grande como Novak Djokovic.
Luego se levantó del césped y fue saludar a su oponente, 16 años mayor que él. Algo le dijo al oído mientras lo abrazaba. Después, el juvenil vestido de blanco lanzó varias pelotas a la tribuna para premiar a los aficionados que lo ovacionaban. Y subió hasta el palco donde estaba su familia para compartir su máximo logro.
En un partido épico, en el que se necesitaron 4 horas y 42 minutos para definir a un ganador, Alcaraz y Djokovic dieron un espectáculo maravilloso que tuvo a los espectadores conectados. El español ganó y la euforia en el campo central fue total tras presenciar la remontada (1-6, 7-6 (8/6), 6-1, 3-6 y 6-4).
Después de su victoria en Queen’s, Alcaraz estimaba que le hacía falta “más experiencia sobre hierba”. Tres semanas después, este genio precoz ha conquistado Wimbledon, su segundo título del Grand Slam, sobre una superficie que hasta ahora creía no dominar.
El tenista de 20 años logra coronarse en el All England Club menos de un año después de ganar en Nueva York el Abierto de Estados Unidos, tras lo cual se convirtió en el número 1 más joven de la historia.
Carlitos no sabe ir despacio y su carrera fulgurante es una prueba de ello. Su eclosión en el circuito ha sido espectacular y desde el principio se le ha considerado el heredero natural de Rafa Nadal.
En la conferencia de prensa, tras la final, Djokovic no solo reconoció a su rival sino que lo comparó con el tridente del tenis mundial. “Tiene cosas de Roger, Rafa y yo. Una madurez impresionante para sus 20 años. Nunca he jugado contra alguien como él”.
Y lo afirma porque en el juego se dieron acciones como la definición del quinto punto del tercer set que necesito 26 minutos y 13 (deuce-igualdad) para definir al ganador, y el rótulo fue para Alcaraz.
Luego Novak, que nunca se da por vencido jugó un gran cuarto set y se llevó la victoria para igualar las acciones 2-2, pero Alcaraz con su talento y ‘rebeldía’ para jugar, dio la pelea y sacando sus mejores puntos se llevó el partido.
En Wimbledon, Alcaraz perdió apenas dos sets para llegar a la final soñada contra Novak, al que venció para instalarse en la lista de ‘reyes’ de Wimbledon.
Más allá de su talento en la pista, Carlos destaca por su buen carácter y su casi eterna sonrisa. Transmite lo mucho que disfruta con lo que hace.
Se fue como nuevo rey de Wimbledon, con la certeza de que su nombre seguirá instalándose en lo más alto del tenis mundial.