¿Alguien quiere pensar en los libros? En la Biblioteca Pública Piloto hasta les ponen ventiladores por constantes filtraciones de agua
Cada vez son más recurrentes las denuncias de que al emblemático lugar se le está filtrando el agua lluvia por el techo.
Están circulando unas fotografías de la Biblioteca Pública Piloto en las que se ve una gran cantidad de libros mojados, otros frente a un ventilador, algunas estanterías tapadas con plásticos y un pedazo del techo roto. “Pruebas infalibles del deterioro en el que se encuentra el emblemático edificio”, dicen algunos.
Sin embargo, EL COLOMBIANO contactó a Ángel Ovidio González Álvarez, actual director de la biblioteca, quien explicó que lo que está sucediendo en realidad es que “el techo del segundo piso es una plancha y siempre después de cada verano, cada invierno, en la plancha se generan unas perforaciones, por lo que debe hacérsele un trabajo de mantenimiento en el que se tapan las ranuras”.
Por estas razones, el día 8 de septiembre se empezó en la plancha un proceso de impermeabilización.
“Según el procedimiento adecuado y teniendo en cuenta que se suspendían labores por ser fin de semana, se aplicó el imprimante aún con el material cementante húmedo para proteger la superficie de posibles precipitaciones, las cuales efectivamente se materializaron en forma de lluvias torrenciales que lavaron el material aplicado dejando expuesta la capa cementante y porosa que permitió el paso de agua al interior de la estructura”, puede leerse en el informe sobre las filtraciones que entregó el interventor (Cubiko S.A.S.) sobre lo ocurrido.
Es decir, el mismo día que impermeabilizaron la plancha, “en Medellín cayó un torrente que afectó y dañó el trabajo, porque el cicatrizante que habían echado en la parte porosa no alcanzó a secarse y generó algunas goteras al interior del recinto”, explicó González Álvarez.
“No es que ‘Se cayó la Piloto’, cayeron unas goteras, y en algunas partes puntuales se cayó el Drywall y hubo una afectación en el material bibliográfico que hoy está en proceso de recuperación”.
“En conclusión —afirma el informe de Cubiko S.A.S.— se considera que el contratista desarrolló las actividades de manera adecuada y que la eventualidad se debió a la materialización de riesgos propios del desarrollo de las mismas”.
Lo cierto es que según comentó otra fuente cercana a la BPP, se ha invertido mucho dinero en el arreglo a la plancha del lugar, pero los arreglos no han sido efectivos y cuando hay aguaceros fuertes se filtra el agua y cae sobre estanterías y sobre zonas comunes del primer piso.
“Con la inundación se afectaron, pero no se perdieron, 360 libros, de los cuales todos, hoy, se encuentran en proceso de recuperación. Es decir, garantizamos que no se pierde un solo libro”, finalizó el director de la BPP.