Petro llamó a Maduro para pedirle ser garante de los diálogos con el ELN
El régimen venezolano sería uno de los países que participarían en el proceso de paz con esa guerrilla. Cuba, Chile y España también están interesados en estar en la mesa.
Periodista egresada de la facultad de Comunicación Social - Periodismo de la Universidad Pontificia Bolivariana.
El presidente Gustavo Petro le pidió formalmente a Nicolás Maduro que Venezuela sea uno de los países garantes en el proceso de paz con la guerrilla del ELN que está por comenzar.
EL COLOMBIANO confirmó que ese paso se dio a través de una llamada entre los dos palacios presidenciales para abordar el tema y la Casa de Nariño prepara una petición formal al Palacio de Miraflores.
La solicitud de Petro a Maduro ocurre en medio del restablecimeinto de relaciones entre Colombia y Venezuela, decisión para la que ya se programó la reapertura de fronteras para el 26 de septiembre y se espera una cumbre entre ambos para octubre.
Además de Venezuela, Cuba, Chile y España también han manifestado su interés de mediar en las conversaciones de paz y en la mesa está que Noruega también se mantenga como garante de este proceso.
Los países garantes de ese tipo de instancias de paz asumen el rol de intermediarios entre las partes que participan en la mesa para que se cumplan los protocolos de los diálogos y ambas partes se respeten.
Se trata de unas labores que van entre la diplomacia y la mediación política para facilitar los acercamientos, sobre todo en casos coyunturales que involucran a partes en conflicto como, en este caso, el estado colombiano y una guerrilla.
Cuando Colombia firmó la paz con las extintas Farc Noruega fue mediador de esa mesa y Cuba sirvió como sede. La isla también facilitó los acercamientos que inició el expresidente Juan Manuel Santos con el ELN y que luego continuó su exmandatario Iván Duque.
Incluso, cuando Duque le pidió a La Habana extraditar a los cabecillas de los elenos tras el atentado terrorista a la Escuela de Cadetes de la Policía en Bogotá, Cuba sustentó su negación ante esa petición en las normas internacionales que debía seguir como estado garante.
Sin embargo, para el caso del régimen su protagonismo en la mesa podría suscitar polémica porque el mismo Nicolás Maduro ha sido acusado en instancias internacionales por presuntas violaciones a los Derechos Humanos que ya han sido documentadas por Naciones Unidas, la OEA y HRW, entre otras instancias.
Colombia es el país donde hace más presencia la guerrilla del ELN, pero ese grupo también tiene influencia en la frontera que conecta con Venezuela y ha sido detectada en la zona limítrofe con Ecuador.
Se trata de un grupo armado que se mueve de un lado a otro de la frontera y que comete actos delictivos en ambas partes, un punto en el que colinda la agenda del presidente Petro con la de Maduro.
La llamada del mandatario al régimen para que Venezuela tenga un asiento en las mesa de paz con el ELN es uno de los pasos más significativos que ha dado la Casa de Nariño en el restablecimiento de las relaciones diplomáticas con el Palacio de Miraflores.
En esa lista de gestos entre Colombia y Venezuela está la llegada de los embajadores Armando Benedetti a Caracas y Félix Plasencia a Bogotá, la reactivación del comercio binacional y la apertura total de la frontera.
Incluso, ya Gustavo Petro anunció otro paso que ha despertado discordias: levantar la denuncia contra Nicolás Maduro por violaciones a los Derechos Humanos interpuesta ante la Corte Penal Internacional.