Farc da primer paso para la verdad sobre secuestrados
En la primera audiencia ante la JEP, se entregó a ex jefes guerrilleros los expedientes para que analicen casos de secuestros y entreguen su informe.
Soy periodista egresada de la Universidad de Antioquia. Mi primera entrevista se la hice a mi padre y, desde entonces, no he parado de preguntar.
En la considerada primera audiencia histórica de excomandantes guerrilleros de las Farc ante la Justicia Especial para la paz, JEP, para aclarar lo sucedido con los secuestrados durante el conflicto armado, la verdad fue la gran ausente y no porque los excombatientes la ocultaran, sino porque el primer paso, que se dio ayer, consistía en entregarles expedientes para que analicen los casos y los expliquen más adelante.
La Sala de Reconocimiento priorizó las retenciones ilegales como el primer caso de la JEP para Farc, por eso durante la diligencia entregó a Rodrigo Londoño Echverri (Timochenko), a Carlos Antonio Lozada y a Pablo Catatumbo, dos informes de la Fiscalía, dos del Centro Nacional de Memoria Histórica, 312 sentencias por secuestro (de las cuales 68 involucran a miembros del Secretariado y del Estado Mayor) y una base de datos de la Fundación País Libre, con cerca de 220 casos de secuestrados de los que se desconoce su paradero, para que con base en esos registros los identifiquen y relaten qué pasó, dónde y por qué se los llevaron.
En esa misma vía, dejó disponibles para consulta en la Secretaría Ejecutiva 42 expedientes judiciales por hechos relacionados con los plagios.
“Según algunas de estas fuentes, en el periodo de expansión militar de este antiguo grupo armado ilegal (Farc), la retención ilegal de personas habría sido adoptada como forma de operar de la organización”, dice el auto 002 con el que inició el proceso.
Este mismo documento señala que de acuerdo a estas mismas fuentes de información, las retenciones tuvieron por lo menos tres finalidades distintas: cobrar grandes sumas de dinero a cambio de la libertad del retenido, presionar al Gobierno, y, en los demás casos, demostrar control sobre la población civil.
La magistrada Julieta Lemaitre, presidenta de la Sala, recalcó la importancia que para el Sistema de Verdad, Justicia, Reparación y No Repetición tiene el aporte de los comparecientes, especialmente sobre el paradero de los secuestrados presuntamente por las Farc de los que no se sabe nada. Por eso dijo que en la próxima audiencia la ex cúpula guerrillera deberá entregar un informe sobre lo que ocurrió con esas personas, pero no se precisó el tiempo para volver a las diligencias.
No llegaron todos
Aunque la expectativa era ver en pleno al Secretariado y al Estado Mayor de las Farc ante la JEP, a esta cita de la ex cúpula guerrillera con la justicia solo acudieron “Timochenko”, máximo jefe de esa extinta insurgencia y hoy presidente del partido Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común; Julián Gallo, cuyo nombre de guerra fue “Carlos Antonio Lozada”, y Pablo Catatumbo Torres Victoria.
Seuxis Hernández Solarte o “Jesús Santrich”, compareció a través de videoconferencia desde la cárcel La Picota, donde se encuentra recluido mientras se soluciona su caso de extradición a EE. UU. por el que es solicitado por la justicia por conspirar para exportar cocaína. La Fiscalía lo solicitó argumentando temas de seguridad.
La cita era para 31 altos exmandos de las Farc, pero los demás no asistieron y fueron representados por abogados. En auto de citación, la JEP fue clara en determinar que los comparecientes podían acudir personalmente o mediante un representante acreditado.
Este fue uno de los principales problemas, ya que la notificación de la citación solo se hizo efectiva el viernes pasado y varios de los excombatientes citados están en zonas alejadas (cómo sucede con Iván Márquez y Hernán Darío Velázquez o “el Paisa”), donde no había opción de autenticar ante un notario su representación. Así lo explicó Diego Martínez, abogado de la bancada de la defensa de la mayoría de los comparecientes.
No obstante, la Sala de Reconocimiento no admitió la personería jurídica de estos abogados y más bien ordenó al sistema autónomo de defensa de la JEP para que oficiara la representación de los llamados a esta diligencia.
“Tenemos voluntad”
Al término de la reunión judicial, “Timochenko” expresó: “reiteramos ante el país nuestro propósito indeclinable de honrar nuestra palabra, que nadie pueda decir jamás que nuestro partido Farc incumplió alguna parte del Acuerdo. Queremos que se conozca la verdad y que haya justicia. Nuestro intento de responder y comparecer ante la JEP no puede ser puesto en duda”.
El excomandante agregó que la comparecencia de una pequeña delegación de exjefes insurgentes se dio como respuesta a la decisión de la Fiscalía de no permitir la presencia de “Jesús Santrich” en la audiencia, por eso prefirieron mandar a sus abogados.
Sin embargo, para Lemaitre fue un logro que todos los convocados comparecieran, algunos a través de sus juristas, y que la JEP tuviera conocimiento de quienes eran sus representantes de confianza.
“Esa voluntad es fundamental para dar inicio al proceso y lograr nuestro objetivo, que es la verdad para las víctimas” dijo Lemaitre.
La magistrada agregó que el inicio de esta etapa es un acontecimiento histórico y se convierte en un paso fundamental en los esfuerzos para poner fin al conflicto armado.
“El sistema integral de verdad, justicia, reparación y no repetición fue creado como parte del Acuerdo Final para la Construcción de una Paz Estable y Duradera, cristalizando la centralidad de las víctimas. La contribución a la verdad, que se inicia en este caso, es un pilar supremo para la satisfacción del derecho de las víctimas a obtener verdad”, señaló la magistrada al declarar abierto el Caso 001.
El momento más emotivo de la audiencia ocurrió cuando Mónica Cifuentes, procuradora delegada ante la JEP, pronunció: “hay que celebrar que estén aquí representados los excombatientes y que lo hacen voluntariamente, sin orden de captura ni circular roja internacional. La presencia sella lo que en otros conflictos internacionales nunca se logró. Por fin llegó el día que tanto esperábamos, el inicio de una fase de reconocimiento de la verdad ha llegado”.