La demora de la Fiscalía para actuar en casos del Gobierno Petro
A la fiscal general, Luz Adriana Camargo, le piden celeridad con el proceso de corrupción más grave del Ejecutivo, la Ungrd, en medio del retiro del fiscal en el caso de Nicolás Petro.
La expectativa sobre el papel de la fiscal general Luz Adriana Camargo es alta desde que llegó al cargo a finales de marzo de este año. No solo porque el presidente Gustavo Petro prometió cuando la posesionó que respetaría la independencia del ente acusador, sino por el perfil y trayectoria de la penalista.
Sin embargo, hechos recientes suscitan dudas sobre su gestión pasados cuatro meses al frente de la Fiscalía. Dos casos de gran magnitud son, por ejemplo, la lentitud de actuaciones frente al escándalo en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd) y la decisión de apartar a fiscal Mario Burgos del caso de Nicolás Petro, hijo del mandatario, a lo que se suma acabar la unidad especial creada para ese expediente.
En contexto: Fiscalía acabó unidad especial que investigaba caso Nicolás Petro y movió al fiscal Mario Burgos
Ambos casos son protagónicos de la agenda pública y judicial. Se esperaba que en el caso de los cuestionados Olmedo López, Sneyder Pinilla y Luis Eduardo López Rosero se tomaran medidas desde antes. Pero lo que se sabe es que su imputación será esta semana y que en los preacuerdos firmados prometen devolver el dinero y pagar pocos años de cárcel.
En lo que tiene que ver con el fiscal Burgos, la Fiscalía decidió suprimir el grupo de tareas especiales que durante más de un año estuvo investigando el caso alrededor de Nicolás Petro y su expareja Day Vásquez.
La decisión llega luego de que la Comisión Nacional de Disciplina Judicial le formuló cargos a Burgos por la filtración de un video en el que se detalla la captura de Petro en su apartamento en Barranquilla, cuando fue a parar al Búnker de Bogotá y acusado formalmente por varios delitos. En un comunicado el ente de control señaló que el caso le corresponderá por reparto a la unidad que investiga el tipo de delitos relacionados con Nicolás Petro que es la de lavado de activos.
Sin embargo, EL COLOMBIANO confirmó con fuentes directas que aún hay videos, grabaciones y documentos que no se conocen sobre el papel de Petro supuestamente recibiendo dinero y moviéndolo con allegados en Atlántico, mientras su padre era candidato.
Entonces, ¿qué está pasando en la Fiscalía?, ¿cómo calificar la gestión de Camargo?
En su momento, cuando se reunió en Presidencia con el jefe de Estado, la fiscal general dijo: “Tenemos una Fiscalía, y lo he repetido insistentemente, muy especial. La Fiscalía pertenece a la Rama Judicial, no es del Ejecutivo. En casi todos los países que tienen un sistema como el nuestro, de corte acusatorio anglosajón, la Fiscalía es una dependencia del Ejecutivo. No sucedió lo mismo en Colombia. En el diseño institucional, se dejó a la Fiscalía en la Rama Judicial. Entonces, mi jefe no es el presidente. Soy la cabeza de la Fiscalía y entiendo que mi jefe es la ciudadanía”, dijo.
Sin embargo, lo mismo no pensaba el presidente Petro con el anterior fiscal general, Francisco Barbosa: “El fiscal olvida una cosa que la Constitución le ordena: yo soy el jefe del Estado, por tanto, el jefe de él”, manifestó en su momento.
¿Quién es la fiscal?
Camargo no hizo parte de la terna inicial que Petro presentó a la Corte. Fue incluida a último momento, según se sabe, por recomendación del ministro de Defensa, Iván Velásquez, con quien la hoy fiscal trabajó durante más de diez años.
Ambos fueron magistrados auxiliares ante la Corte Suprema y en 2013, Velásquez se convirtió en el director de la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (Cicig), y pensó en Camargo para completar su equipo de trabajo.
La Corte, sin embargo, no pensó en elegir a Camargo en las primeras deliberaciones sino a Amelia Pérez, mucho más cercana a Petro. Pero publicaciones incendiarias del esposo de la jurista, militante petrista, hicieron que se desinflara su aspiración.
Para el abogado y profesor de la Universidad Javeriana Carlos Prieto, tiene una formación y trayectoria destacables, pero está a tiempo de acelerar sus investigaciones. “Son casos complejos que requieren trabajo técnico cuidadoso. Esperamos que haya rigor en la gestión y que la serenidad no implique encubrimiento”, señala.
Frente al caso del fiscal Burgos, el profesor considera que “sí llama la atención lo sucedido en el caso de Nicolás Petro, por la carga mediática y política. Hay que confiar en que la remoción del funcionario atienda a razones jurídicas o técnicas procesales; de no ser así, sería una gravísima politización del ejercicio judicial de la Fiscalía y un hecho político que pondría en tela de juicio la labor de la fiscal general”.
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