Educación

Diez cosas para aprender en el preescolar

Preescolar es una etapa de preparación para el colegio. El aprendizaje en esta debe evaluarse desde las diferentes dimensiones.

23 de febrero de 2015

Por Lina Marcela Velásquez R.

El preescolar suele asociarse con juego más que con aprendizaje. Y sí, tiene que ver con el juego, pero por medio de este los niños también aprenden. Es una etapa de acercamiento a la educación y las relaciones con otros niños y de preparación frente al ambiente de la escuela, donde adquiere conocimientos y habilidades para su formación integral.

Al finalizar esta etapa es importante evaluar qué ha aprendido el niño, no solo desde el ámbito cognitivo.

Mónica Bolívar, licenciada en educación preescolar y docente de Pinceladas de Color, afirma que la mejor forma de hacerlo es evaluando por dimensiones y “no utilizar numerologías porque cada niño tiene un nivel y forma de aprendizaje distinto”.

Es importante que la formación haga énfasis en la alegría, en su bienestar y sus necesidades. “No es lo mismo un niño apoyado por sus padres que aquel que tiene que hacer todo solo. Hay que enfatizar de acuerdo con sus necesidades y procurar que sea feliz”, afirma.

Para Olga Lucía Riveros, rectora del Kínder Pinocho, los proyectos pedagógicos que abarcan las dimensiones del desarrollo y el juego con intención pedagógica son los ejes que propician el aprendizaje en esta etapa y preparan al niño para su siguiente paso escolar.

Mónica y Olga Lucía, plantearon algunos conocimientos y habilidades que los niños deben haber adquirido al finalizar preescolar.

Cognitiva

· Matemáticas: generalmente aprenden a escribir los números hasta 100, a contar hasta 50 y a hacer cálculos de 10 en 10. “Tratan de dejar a un lado sus dedos y lo hacen con rapidez y seguridad”, agregó Mónica. Suman y restan, manejan el ábaco, completan cantidades y hacen conjuntos, entre otros.

· Lenguaje: adquieren aprestamiento en lectoescritura para afrontar adecuadamente los requerimientos de los colegios. Conocen todo el abecedario, forman palabras y escriben con dictados. También adquieren habilidades lingüísticas como expresar sentimientos y necesidades, formular preguntas, hipótesis, mostrar liderazgo, y aprenden a comprender y entender el mundo que nos rodea, afirmó Olga Lucía.

Socio-afectiva

· Introyección de valores: el respeto, la solidaridad y la responsabilidad le permitirá al niño una mejor relación con la familia y la sociedad.

· Independencia y autonomía: indispensables para una alta autoestima y un mejor desenvolvimiento en todas las etapas de la vida.

· Tolerancia a la frustración: deben saber que no pueden tenerlo todo, que se gana y se pierde, y se tienen fortalezas y debilidades.

· Responsabilidad: con nosotros mismos, con las tareas, con el medio ambiente, con los demás. Ser responsables nos lleva a adquirir compromisos y entender el sentido de las promesas y la consecuencia de nuestros actos.

· Control de impulsos y emociones: el niño aprende a regularse emocionalmente, a razonar, a manejar el enojo, el miedo y a expresar amor y otras expresiones.

Comunicativa

· Resolución de problemas: para enfrentar las pequeñas dificultades que se presentan en el colegio sin traumas o estados de ansiedad, ser recursivos y propositivos.

Corporal

· Destrezas motoras: adquiere motricidad tanto fina (rasgar, punzar, recortar, hacer trazos) como gruesa (correr, saltar, brincar) y precisión en el manejo de herramientas, abotonarse y atar los cordones, entre otros.

Artística

·Creatividad: quiere su propio estilo y color, crea a su imagen y entorno .