Enviaron a prisión a dos disidentes señalados de la masacre de funerario y su familia en Tibú, Norte de Santander
El crimen terminó por ser la antesala de la ola de violencia que sacude al Catatumbo por la confrontación entre las disidencias de las Farc y el ELN.
Cazador de historias. Futbolista frustrado: me tocó gambetear con las palabras.
Dos señalados miembros de las disidencias de las Farc fueron enviados a prisión por su aparente responsabilidad en la masacre de tres personas en Tibú (Norte de Santander). Ese crimen, precisamente, fue la antesala a la ola de violencia que sacudió al Catatumbo y que llevó a que se decretara la conmoción interior.
Los enviados a prisión fueron identificados como Brandon Andrey Cárdenas Sanguino, alias Brandon y Luis Felipe Taborda Delgado, alias Dayron Pérez. Ambos, indicó la Fiscalía, pertenecen al Frente 33 de las disidencias y habrían organizado la logística para que se cometiera el crimen.
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El crimen ocurrió el pasado 15 de enero en la vereda La Llana de Tibú.
Miguel Ángel López, un trabajador de servicios funerarios, se desplazaba en su vehículo en compañía de su esposa y sus dos hijos. De pronto, fueron sorprendidos por un grupo de hombres armados que dispararon de manera indiscriminada.
López, su esposa y su bebé de seis meses fallecieron en la escena del crimen. Uno de los hijos sobrevivió y alcanzó a alertar a las autoridades. Ese crimen precedió una confrontación bélica entre las disidencias y el ELN –que todavía perdura– por el control de la región del Catatumbo: 54.098 personas resultaron desplazadas, se contabilizaron 56 muertes violentas y 32.448 personas más resultaron confinadas.
Los dos señalados disidentes deberán responder por los delitos de homicidio agravado, concierto para delinquir agravado y fabricación, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones.
“En el curso de la investigación se conoció que alias Brandon, posible cabecilla de una estructura del grupo armado ilegal, habría recibido la orden de ejecutar la acción criminal, por lo que al parecer ubicó a los sicarios y dispuso las actividades logísticas y de vigilancia”, señaló la Fiscalía.
Mientras que alias Dayron Pérez, según la investigación, sería el responsable de realizar seguimientos a las víctimas para después definir el momento en el que se ejecutó el ataque armado.
“Estos dos hombres también serían los articuladores del cobro de extorsiones, hurtos de vehículos e infraestructura petrolera, tráfico de estupefacientes, atentados contra la fuerza pública y otras conductas delictivas en la región del Catatumbo (Norte de Santander)”, añadió la Fiscalía.
Ninguno de los imputados aceptó los señalamientos que les hizo la Fiscalía. Permanecerán en prisión mientras avanza el caso.
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