Calidad del aire en el Valle de Aburrá amenaza la salud humana
Dos fenómenos externos como la arena del Sahara y los incendios forestales del país y de Venezuela agravan la calidad del aire de la región.
El Área Metropolitana declaró ayer la “urgencia por contingencia atmosférica” en Medellín y todos los municipios vecinos del Valle de Aburrá.
Lo que era comentario de la gente se volvió realidad: el aire del Valle de Aburrá está enrarecido desde hace días. El aire del sur del Aburrá ha tenido tonos grises y amarillentos, no solo bajo la presencia de Sol sino en su ausencia y en diversos momentos, notándose mucho al finalizar la tarde.
María del Pilar Restrepo, subdirectora Ambiental del Área Metropolitana, precisó que todo el apoyo que ofrecen las Universidades, la de Antioquia, la UPB y el Politécnico Colombiano Jaime Isaza a instancias de la Redaire, dan señales de que el material particulado está por encima de las concentraciones.
Cinco estaciones de medición de calidad del aire presentaron el pasado lunes niveles considerados dañinos para la salud humana en las estaciones cerca a la Universidad de Antioquia, de la Casa de Justicia de Itagüí, estación metro La Estrella, Liceo Concejo de Itagüí y Corporación Lasallista en Caldas.
El nivel dañino tiene que ver con el material particulado de tamaño 2,5 micras, el más pequeño que se mide, que puede provocar enfermedades respiratorias y, a largo plazo, cáncer de pulmón.
¿Qué pasa? En marzo y noviembre se presenta, generalmente, un fenómeno de lluvias. Sin embargo, este año, según Carmen Elena Zapata, directora de la Red de Monitoreo de Calidad del Aire, hay dos eventos externos que lo agravan: la arena del Sahara (África) y los incendios en el oriente y norte del país y en Venezuela (ver análisis).
La realidad
La anomalía persistía ayer martes, según los reportes del Sistema de Alertas Tempranas (Siata).
En la estación de la Casa de justicia de Itagüí, el promedio de las últimas 24 horas (11 a.m. del lunes a 11 a.m. de ayer) eras de 92,5 microgramos por metro cúbico, superando por casi 30 el límite máximo.
En La Estrella el promedio era de 85,8, habiendo alcanzado hasta 250 microgramos por metro cúbico entre las 9 y las 11 de la mañana.
En Caldas el promedio ha sido de 90 miligramos por metro cúbico en las últimas 24 horas, también con niveles de hasta 250.
Los niveles se han superado en otras estaciones pero para el material particulado de 10 micras, como en el Politécnico Jaime Isaza.
¿Qué hacer?
El Área Metropolitana determinó la sesión permanente del Consejo de Gestión del Riesgo y formuló diversas recomendaciones: dejar el carro particular en casa, utilizar el sistema integrado de transporte, no hacer ejercicio al aire libre entre 6:00 y 10:00 a.m. y evitar que personas vulnerables (menores de 5 años y adultos mayores) se expongan al ambiente.
Se espera que a fines del presente mes empiece a disiparse el fenómeno.
Otros factores adversos
Diversos investigadores señalan que el territorio encerrado por montañas, la poca velocidad de los vientos, el aumento de fuentes móviles como carros y motos convirtieron al Valle de Aburrá en una especie de trampa de elementos contaminantes. El ranquin de la contaminación lo encabeza el material particulado inferior a 2,5 micrómetros (PM 2,5), producido por fuentes móviles (carros que funcionan con diésel y gasolina) en un 79 % y las fijas (industrias) 21 %. El PM 2,5 también se forma en el aire por gases como óxidos de azufre y nitrógeno y compuestos orgánicos volátiles .