Villamizar: de mover los hilos de la Alcaldía en EPM, a un cargo de 22 millones en el Edificio Inteligente

El pasado 22 de octubre, la junta directiva de EPM aprobó la creación de dos nuevos cargos de alto perfil: la Dirección de Gestión de Relaciones con el Gobierno Local y Regional y la Dirección de Gestión de Relaciones con el Gobierno Nacional. Ambos con un salario de casi 22 millones de pesos y un contrato a término indefinido, toda una rareza en una empresa que hace pocos días ajustó los beneficios para empleados nuevos.

Como era de esperar, uno de esos cargos parece pagar favores políticos de la Alcaldía de Daniel Quintero, pues fue a parar en manos de la exsecretaria de Gobierno María Camila Villamizar, quien después de dar órdenes desde la Alpujarra a la empresa para que pusieran y quitaran empleados, ahora será la encargada de las relaciones con el Gobierno Nacional. La figura parece risible, pues de esto estaban encargados el gerente y los vicepresidentes.

La denuncia la hizo el exconcejal del Centro Democrático Simón Molina y el sindicato de trabajadores de UNE y EPM.

Según la descripción del cargo, publicada hace algunas semanas en el banco de empleos de la compañía —que está caído debido al ciberataque que recientemente recibió EPM— entre las funciones estarán dirigir, coordinar, evaluar y alinear las relaciones con el Congreso de la República y el Gobierno Nacional y así proteger la reputación y velar por los intereses de EPM y su Grupo Empresarial.

El público al cual iba dirigida la oferta de empleo era bastante particular y entraba en la categoría de “referidos”, es decir que solo podían participar aquellas personas que fueran recomendadas por algún alto directivo de la compañía, que en esta ocasión, según le confirmaron varias fuentes a EL COLOMBIANO, fue el gerente de la compañía, Jorge Andrés Carrillo.

Ya en otras oportunidades este medio reveló con pruebas de chats de WhatsApp como desde la Alcaldía enviaban hojas de vida de “amigos de la casa” para que se les recompensara con un buen puesto. Era Villamizar la encargada de los encargos y ahora ella misma recibe un empleo de 22 millones de pesos después de haber salido de la Alcaldía en circunstancias bastante extrañas, pues estuvo hasta en Cúcuta en lo que parecía una precandidatura política por el Movimiento Independientes.

¿Quién es Villamizar?

María Camila Villamizar Assaf nació en Cúcuta, es abogada y especialista en derecho comercial, derecho de las comunicaciones y marketing político. Su experiencia, como la del alcalde Quintero, ha estado en el sector de las comunicaciones. Por esa experiencia en común y por su trabajo como secretaria del exministro TIC de David Luna, fue que llegó a la Alcaldía de Medellín como secretaria privada en enero del 2020.

Allí, cuentan quienes hicieron campaña con Quintero, se encargó de aislar al Alcalde en un cerrado círculo de consejeros y asesores donde ella era la voz cantante. Afirman también quienes trabajaron con ella que desde el principio tuvo conflictos con otros funcionarios, asesores y subalternos por su trato hacia ellos. Dicen que en su oficina era normal escuchar gritos y hasta llantos de ira. “Ella es de las personas que no pide el favor sino que da la orden”, aseguran.

Durante su tiempo como secretaria Privada se abanderó de EPM, tanto que terminó trabajando casi a diario en las oficinas de la empresa y se reunía semanalmente con los vicepresidentes en representación del alcalde. Cuentan miembros de la junta directiva de EPM de ese entonces, que al principio iba a tomar notas y a atender la agenda del alcalde mientras que este presidía las reuniones, pero que con el paso del tiempo fue ella quien terminó haciendo las veces de presidente de la junta, pasando incluso por encima del mismo gerente de la compañía.

En su momento, Álvaro Guillermo Rendón, quien estuvo a la cabeza de EPM desde enero del 2020 hasta febrero del 2021 cuando Quintero en medio de una tormenta política le pidió su renuncia, denunció que Villamizar fue la encargada de gestionar una toma hostil de la compañía que terminó con su salida. Esta versión de Rendón fue confirmada por otras fuentes cercanas al gabinete consultadas por este diario.

Tiempo después de la salida de Rendón, se conoció también que Villamizar le enviaba hojas de vida por WhatsApp en las que le ordenaba que nombrara a ciertas personas en algunos gerencias clave de la compañía, pasando por encima de los procesos de selección establecidos en la empresa. Estas conversaciones que podrían constituir, entre otros, el delito de tráfico de influencias, llevan más de un año en poder de la Fiscalía.

Después de cumplir su cometido con la gerencia de EPM, Villamizar se echó al hombro la defensa de la revocatoria que se adelantó en contra del alcalde Quintero. “Ella era la que iba a Bogotá a reunirse con los magistrados, con los abogados y con los senadores para que lo de la revocatoria no avanzara”, contó alguien que conoció de cerca su gestión. Fue esa tarea, que completó exitosamente, pues la Registraduría tumbó definitivamente la revocatoria el mes pasado, la que la habría catapultado al cargo recién creado que ahora ocupará en EPM.

En marzo de este año, cuando ya era la más fiel escudera del alcalde Quintero, Villamizar llegó a la secretaría de gobierno después de que Esteban Restrepo renunciara, junto con otros funcionarios, para sumarse a la campaña presidencial de Gustavo Petro. Allí defendió a capa y espada a su jefe cuando fue suspendido de su cargo por la Procuraduría por participar activamente en política a favor del ahora presidente, y se encargó de hacerle la vida imposible al Alcalde encargado por el entonces presidente Duque, Juan Camilo Restrepo. Tanto, que llegó a presidir reuniones de despacho con los secretarios sin ni siquiera avisarle, tal como lo hizo tiempo atrás con los vicepresidentes de EPM.

Sin embargo, sus relaciones conflictivas con otros miembros de la Alcaldía y en especial con el Concejo de la ciudad, hicieron que su paso en la secretaría de Gobierno fuera corto. Algunos concejales, que prefirieron no ser nombrados para evitar caer en el matoneo por redes sociales del Alcalde y su esposa Diana Osorio, afirman que era tal el maltrato, la humillación y el irrespeto que recibían por parte de Villamizar que extrañaban a Esteban Restrepo, quien les parecía “más ponderado”. Finalmente, salió del cargo en octubre de este año.

Fue un secreto a voces en los pasillos de la Alpujarra que Villamizar era la ficha del Alcalde Quintero en el gobierno Petro. En el piso 12 de la Alcaldía esperaron hasta el día de la posesión del presidente para que Villamizar fuera nombrada ministra TIC. Sin embargo, algunos senadores del Pacto Histórico se opusieron y su nombramiento nunca ocurrió.

También se especuló que la exsecretaria se lanzaría el próximo año a la Alcaldía de Cúcuta por el movimiento “Independientes” de Daniel Quintero. De hecho, el pasado 3 de noviembre el Alcalde publicó una foto de Villamizar acompañada por Juan Pablo Ramírez —actual secretario de Gobierno— y Esteban Restrepo con el texto: “¿Qué tal María Camila Villamizar para Cúcuta?”

Al parecer esa idea no cuajó mucho porque en los próximos días, la mujer que le ha hablado al oído durante tres años en la Alcaldía de Medellín, será, durante un tiempo indefinido, el enlace de EPM con el Palacio de Nariño y con el Congreso en Bogotá.