Antioquia

Cuidado: que el temor por la covid-19 no le haga descuidarse con el dengue

Egresado de la U.P.B. Periodista del Área de Investigaciones, especializado en temas de seguridad, crimen organizado y delincuencia local y transnacional.

13 de mayo de 2020

Las autoridades sanitarias de Medellín están inquietas con una disminución de los reportes de contagios de dengue, al parecer ligada al encierro de la comunidad, lo que podría generar un subregistro riesgoso en momentos en los que la red de salud está en alerta por la covid-19.

Raúl Rojo, coordinador del Programa de Control de Vectores de la Secretaría de Salud, le contó a EL COLOMBIANO este miércoles que, antes de la cuarentena (22 de marzo), se venían reportando en promedio 30 casos semanales. Esas cifras cayeron abruptamente, al punto de que en las últimas dos semanas apenas se registraron tres casos. “Eso no es normal”, dijo el experto.

Esto no implica que haya mermado la enfermedad, que desde el año 2000 es endémica en la ciudad, sino que la gente no está consultando a los doctores y tal vez se automedica, por temor a salir de casa y asistir a una clínica en momentos de pandemia.

“Es una situación delicada, porque el dengue puede ser mortal si se empeoran los síntomas. Además, si el virus no se trata a tiempo, el paciente puede requerir hospitalización y cuidados intensivos, y en esa circunstancia entraría a competir por la atención con los enfermos de covid-19”, acotó Rojo.

Las actuales condiciones climáticas son propicias para que se propague este mal. La alternancia de lluvias breves, seguidas de tiempo seco con altas temperaturas, favorecen la aparición de criaderos de zancudos en charcos, floreros, llantas, tanques y demás aguas estancadas.

Entre los insectos que empiezan a pulular, el Aedes aegypti y el Aedes albopictus son los más peligrosos, pues pueden infectarse y transmitir a los humanos el dengue, el zika y el chikungunya.

Según datos de la Secretaría de Salud, a la fecha hay registros de 406 casos de dengue en Medellín, dos de zika y dos de chikungunya, aunque deben haber más. En Cali, contó el funcionario, las cifras rondan los 9.000 enfermos.

Claudia Cuéllar Segura, directora (e) de Promoción y Prevención del Ministerio de Salud, presentó el pasado abril un informe, solicitando que se refuercen las medidas de prevención contra el dengue “en zonas urbanas que se encuentran por debajo de los 2.200 metros sobre el nivel del mar. En el país, 821 municipios están en riesgo de presentar brotes de dengue”, señaló.

Aunque suele haber más complicaciones en los adultos mayores de 65 años, la mayor proporción de casos y muertes por dengue está en el grupo de los menores de 15, por lo que hay que tener especial cuidado con estas dos poblaciones. En Medellín no se presenta un deceso por este virus desde 2016.

Prevención en acción

Históricamente, las comunas más propensas a las afectaciones por dengue son Popular, Santa Cruz, Manrique, Aranjuez, Castilla, Doce de Octubre, San Javier y Belén, al igual que el corregimiento Altavista.

En esos vecindarios ya comenzaron las tareas preventivas de fumigación e instrucción con perifoneo a la comunidad. Rojo indicó que en 250 colegios de la ciudad hay ovitrampas instaladas, que permiten medir la frecuencia y cantidad de huevecillos que depositan los insectos; y en otras 100 instituciones educativas se capturan los mosquitos para analizarlos y determinar si son portadores del virus. Este conocimiento permite anticiparse a los brotes.

Frente a la pregunta de si nuestra red de salud está preparada para, en el peor de los casos, atender una epidemia de dengue al mismo tiempo que la pandemia por el nuevo coronavirus, Rojo señaló: “la Secretaría hace capacitaciones periódicas al personal en los hospitales, y desde ese punto de vista estamos preparados, y para evitar que crezca la demanda de servicios médicos estamos generando estas alertas tempranas. Sin embargo, el control del dengue está en cada persona”.

Cuéllar indicó que “todos estamos en riesgo de contraer dengue, chikungunya, zika y covid-19. La mejor manera de contrarrestar estas enfermedades, que hoy no tienen vacuna, es el autocuidado, quedarnos en casa, cumplir con las normas de higiene para evitar el contagio de los diferentes virus”.

Si hay síntomas como la fiebre por encima de 39 grados centígrados, dolor abdominal o de cabeza, malestar general, dolor muscular y de articulaciones, la persona debe consultar telefónicamente a un galeno. Si pasados tres días no mejora la condición, o aparece sangrado, vómito y diarrea, es mejor acudir a una cita de atención prioritaria.

La funcionaria del Ministerio recordó al personal médico que, “ante cualquier síndrome febril, tenemos que hacer un diagnóstico diferencial, para hacer una confirmación de a enfermedad y dar el tratamiento adecuado”.

Rojo precisó que por el momento no hay estudios sobre qué sucede si a un mismo paciente le da dengue y covid-19, y si esta situación empeora o no sus dolencias.