La alimentación es un principio de funcionamiento de todo ser que tiene vida. Los misterios que encierra esta práctica, que nos acompaña desde antes de nacer, va más allá de buscar la saciedad o la satisfacción.
Conversamos con Claudia Velásquez, nutricionista dietista y coordinadora del grupo de investigación en Alimentación y Nutrición Humana (GIAN) de la Universidad de Antioquia, para rebatir algunos de los mitos que se han insertado en discusiones cotidianas sobre las tendencias de la alimentación saludable. “En la nutrición de una persona es importante el aporte de todos los nutrientes, no se puede asegurar que la grasa o el carbohidrato es malo, porque todos los nutrientes son necesarios, de hecho se ha establecido un requerimiento mínimo de grasas, carbohidratos y de vitaminas y minerales para que un humano pueda soportar la vida”, argumenta Velásquez.
También afirma que como nutricionista es reacia a conferir propiedades curativas a un solo producto, pues algunas personas son más aficionadas a incorporar la novedad que a modificar sus hábitos de consumo.
1.Azúcares, ¿Sí o no?
No se debe eliminar el azúcar de la dieta. El cerebro necesita glucosa para funcionar, así que nuestra dieta debe contener carbohidratos. Sin embargo, sí es cierto que la recomendación es no sobrepasar el 7% de las calorías del día aportadas por azúcares: una cucharada de azúcar al día. Las frutas también aportan azúcar, sin embargo este va acompañado de fibra.
2. Solo alimentos orgánicos
No sólo lo orgánico es saludable, pues en la agroindustria hay regulaciones que controlan las cantidades permitidas de pesticidas y organofosforados. La recomendación para quienes no son amigos de los productos orgánicos, es hacer un lavado muy juicioso de los alimentos.
3. Verduras y solo verduras
La Food Nutrition Board FDA de Estados Unidos ha hecho fuertes campañas sobre los beneficios de incluir frutas y verduras en nuestra dieta, pues, entre otras cosas, contrarrestan la diabetes y disminuyen obesidad. Sin embargo, si bien es cierto que debemos implementar siete porciones de frutas y verduras en el día, alimentarnos solo de ensaladas no es sinónimo de dieta saludable.
4. Evitar todas las grasas
Las grasas no se pueden eliminar de la dieta en ninguna edad. Su ausencia genera problemas de salud, pues estas no sólo tienen la función de acumularse, sino, entre otras cosas, estructurar y definir el desarrollo cerebral en los primeros años de vida. También tienen la tarea de mantener lubricadas las células del organismo y sintetizar hormonas. El problema con la grasa es el exceso y el tipo de grasas, así que estas se deben consumir de forma moderada. La mejor calidad de grasa es la monoinsaturada como el aceite de oliva o el aguacate. Hay que consumir grasas.
5. Comer libre de gluten
Si usted no es intolerante a la gliadina presente en el gluten, significa que no desarrolló desde el nacimiento la enfermedad Esprúe Tropical. Esa rara afección se presenta principalmente en personas caucásicas y son solo estas personas las que no pueden consumir trigo, las demás no tendremos problemas.
6. Saltarse una comida
Estudios demuestran que el desayuno regula el hambre durante el día, así que saltarse una comida tan importante como esta, podría ser de los peores errores que se cometen intentando rebajar. En el desayuno es clave comer una porción de carbohidrato y una proteína. Coma fraccionado y en pocas cantidades.
7. Los batidos son curativos
Los batidos no tienen propiedades curativas ni mágicas. Pero si usted de desayuno o de media mañana se iba a comer un frito lleno de grasa y lo cambió por un batido, esa será la buena conducta que le ayudará a mantener hábitos saludables, no el batido en sí mismo.
8.El café deshidrata
El café como cualquier alimento produce cosas en el cuerpo, pero tomado en buena medida, no serán patológicas. Es normal que beber café produzca ganas de orinar, pero nunca al grado de la deshidratación. A su favor el café contiene polifenoles o antioxidantes, y en su contra tiene la cafeína que en grandes cantidades, hace daño.
No se afectará la salud carviovascular si la cafeína se consume en una concentración de siete gramos (una cucharada por pocillo y no más de cuatro pocillos de 100 ml al día), y se prepara en cafetera con filtro para evitar los diterpenos, relacionados con el aumento presión.
9. Agua con limón en ayunas
El agua con limón funciona muy bien para hidratar y aportar vitamina C al cuerpo, sin embargo esta no destruye la grasa corporal. La grasa del cuerpo se pierde cuando uno consume menos de lo que su cuerpo necesita en calorías. Para perder esa grasa hay que moverse más o comer menos.
10.Los carbohidratos engordan
Existen dos tipos de carbohidratos: los simples como los azúcares y los complejos como los almidones. Lo recomendado es consumir más de los complejos que de los simples y como el cerebro necesita glucosa para funcionar, los carbohidratos no se deben eliminar de la dieta. Dentro de los carbohidratos complejos, los más beneficiosos son los que no han sido industrializados y refinados.