Esta semana se produjo un hecho destacable en el Congreso de la República: hubo una coincidencia política entre las bancadas que apoyan al Gobierno en el tema de la paz y la bancada del Centro Democrático, su más fuerte opositor, para aprobar las modificaciones a la llamada ley de orden público, que le da facultades al presidente para suspender órdenes de captura a miembros de organizaciones que están en proceso de paz con el Gobierno y para establecer zonas de concentración de las fuerzas insurgentes como resultado final de dichas conversaciones y en proceso de dejación de armas y de desmovilización.
Por supuesto, otro tipo de condicionamientos no son, en principio, procedentes porque corresponden a las dos delegaciones en la Mesa de Conversaciones...