Mientras el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, interrumpe sus vacaciones repitiendo en medios la justificación de la venta del 57,61 por ciento que tiene la Nación en Isagén, opositores comenzaron una “tutelatón” como última esperanza para detener la subasta del próximo 13 de enero.
Desde Sintraisagén, sindicato de base de la generadora, se tenía noticia ayer de 10 tutelas interpuestas antes jueces penales, los unicos que trabajan por estos días, en varias ciudades.
Pero solo dos de ellas fueron admitidas desde finales de diciembre pasado y estarían dentro de los 10 días hábiles que tiene el juez para decidir si tutela los derechos al debido proceso y al acceso a la administración de justicia.
Y así como el juez puede negar el recurso, también acoger la suspensión temporal solicitada, mientras se conocen los fallos de fondo en cuatro demandas que aún no resuelven el Consejo de Estado (tres) y el Tribunal Administrativo de Cundinamarca.
“El Gobierno puede tener la ventaja de la vacancia judicial, pero hasta el último día daremos la pelea por detener un daño irreparable para la Nación como la privatización de Isagén”, comentó ayer el presidente de Sintraisagén, Óscar Vallejo Giraldo.
Defensa y ataques
Entre tanto, el ministro Cárdenas insiste en que la enajenación, por la que se esperan más de 6,5 billones de pesos no es un asunto improvisado y que su único objetivo es contribuir a financiar la construcción de vías de cuarta generación (4G).
“Comenzaremos capitalizando al banco que creamos, la Financiera de Desarrollo Nacional (FDN), que dará créditos de largo plazo para que las concesiones pueda ser viables y también hacer inversiones de capital para que los proyectos se construyan”, explicó el funcionario en medios radiales.
Sin embargo, José Roberto Acosta, experto en finanzas y e impulsor de la “tutelatón” contra la venta de Isagén, considera que “el Estado colombiano no ha sido un buen banquero y de ello hablan fracasos del pasado como el IFI y el BCH”.
En cambio, señala que la subasta abre la posibilidad para que sean privados los que saquen provecho del incremento de las tarifas de energía en un nuevo escenario con tasas de inflación al 7 por ciento anual.
Desde la orilla política, la senadora antioqueña Sofía Gaviria, que lidera una de las demandas contra la venta de Isagén, cuestionó que el Gobierno busque impulsar la venta en plena vacancia judicial y evitar movilizaciones en contra.
“Yo pedí al Partido Liberal, y en eso me acompaña la senadora Viviane Morales, que nos salgamos de la Unidad Nacional como forma de rechazo a ese empecinamiento del Gobierno por vender un bien tan preciado para la soberanía energética del país”, comentó con indignación a este diario la parlamentaria.