Las producción cafetera solo será sostenible, si la cadena global de comercializadores, tostadores y consumidores reconocen el rol determinante que tienen los caficultores en la base de la cadena y que se traduce en 25 millones de familias en 60 países.
En esta consigna coincidieron las intervenciones en la mañana de este martes de los presidentes de Colombia, Juan Manuel Santos, de Costa Rica, Luis Guillermo Solís, y de Honduras, Juan Orlando Hernández, en la sesión inaugural del Primer Foro Mundial de Productores de Café, que se realiza hasta el miércoles en Medellín y reúne a 1.200 representantes de 45 países.
El presidente Santos cuestionó la disparidad entre lo que se transa en inventarios reales de café y el volumen que se moviliza en el mercado de futuros de café en la Bolsa de Valores de Nueva York.
“Los desafíos que tenemos los países productores son muy grandes, pero si trabajo juntos, seguiremos haciendo del café un motor de desarrollo y de equidad”, agregó Santos.
Por su parte, el presidente de Costa Rica alertó los efectos nocivos que tienen en la producción mundial de café el cambio climático, las enfermedades, las temporadas de bajos precios y las prácticas de los comercializadores.
“Se vuelve obligatorio poner en la mesa de la agenda global la sostenibilidad cafetera, con el objeto de proteger a los productores con innovación tecnológica, introducción de procesos productivos amigables con el ambiente y movilizar potencialidades locales para elevar la competitividad en territorios cafeteros”, agregó el mandatario centroamericano.
Pero el presidente de Honduras fue más contundente en su discurso, al provenir de una familia caficultora: “El tema aquí es cuánto le queda al productor por cada taza de café que se vende en Europa o Nueva York (...) se queda con una mínima parte de la rentabilidad, el resto de la cadena no le está reconociendo su trabajo”.
Añadió Hernández que se debe caminar hacia un trato justo que apunte a unos precios que remuneren los cultivos, de manera de que la producción no descienda ante un consumo creciente.
Finalmente, el director de la Organización Internacional del Café, Jorge Sette, anunció que esta entidad intergubernamental de países exportadores y compradores del grano está diseñando un plan de acción que prioriza programas de apoyo a pequeños productores.