El relevo en la gerencia de la Federación Nacional de Cafeteros y en sus cuadros directivos, la modificación en el esquema de compra del grano y la posibilidad de exportar pasillas, son algunos cambios en la caficultura colombiana en el último año, los cuales coincidieron con la llegada de los integrantes de Dignidad Cafetera al gremio cafetero.
Fredy Andrade, miembro de ese movimiento y delegado por el Huila en el Congreso Nacional Cafetero, que terminó el viernes en Bogotá, declaró que las manifestaciones y bloqueos de febrero de 2013 fueron acciones necesarias para que el momento de crisis que se vivía, tuviera atención por parte del Gobierno.
“El cambio de gerente en la Federación y sus colaboradores se inició en la carretera”, enfatizó el dirigente al hacer referencia a la salida de Luis Genaro Muñoz y la llegada de Roberto Vélez Vallejo.
José María Henao, otro representante de Dignidad, ahora delegado por Antioquia, sostuvo que además del cambio gerencial se han dado transformaciones comerciales que, reconoció, no se han visto reflejadas en el bolsillo de los productores.
Por su parte, Esteban Zapata García, delegado del Valle, aseguró que hace un año se crearon malas expectativas entorno a la llegada de Dignidad a la Federación. “Demostramos que nuestra intención era construir, pues muchos pensaron que llegaríamos a acabar con la institucionalidad y lo que hemos logrado es darle una nueva dinámica al sector”.
A su turno Rubén Ruiz, delegado del Magdalena, sostuvo que en el 2015 hubo un despertar: “todos salimos del sueño y la apatía que había en la Federación. Se pedían cambios y nuevas reglas de juego y algo de eso se ha visto”.