En un año, Colombia ascendió dos puestos en el Índice de Condiciones Sistémicas para el Emprendimiento Dinámico, entre 15 economías de América Latina y quedó en el quinto lugar. Así lo conoció EL COLOMBIANO, para esta edición (ver gráfico).
Este escalafón, que sigue las mejores prácticas para la elaboración de índices de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde), tiene como propósito ser una herramienta “que ayude a identificar las principales fortalezas y debilidades de los países y a diseñar una agenda de iniciativas para fomentar el emprendimiento”, explicó Hugo Kantis, director del Programa Emprendedor de Prodem, del Instituto de Industria de la Universidad Nacional de General Sarmiento (Ungs), de Argentina.
En general, en los países de América Latina están desde la mitad del escalafón global (60 territorios) hacia abajo lo que suscita una inmensa brecha entre las economías.
En Colombia, los resultados son positivos dado su avance, aunque no sobrepasa a Chile, Argentina, México y Costa Rica. De hecho, en ningún caso, los países de la región están en una etapa “alta” de los pilares. A lo sumo, Argentina, Chile y México están en un nivel medio-alto en políticas y regulaciones.
“Colombia tiene como característica la heterogeneidad en sus ecosistemas de emprendimiento, por regiones y tiene una potencialidad que le debe permitir estar en una mejor posición”, dijo Kantis.
En este proceso, hay que reconocer que si bien hay una alta intención emprendedora, según el Global Entrepreneurship Monitor, el país “tiene retos en disparidades de las diferentes regiones (...) Muchas de las políticas locales no son fuertes para estimular el emprendimiento y la innovación”, afirmó Juan Camilo Quintero, director de Innovación y Emprendimiento de la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (Andi).
En concordancia con lo anterior, el Índice encuentra un punto medio en capital humano emprendedor, educación, cultura, condiciones de la demanda, financiamiento y políticas. Los principales retos están en los contactos y la plataforma de Ciencia, Tecnología e Innovación (CTeI) para emprender. “Se destaca en capital humano emprendedor, pero esos proyectos necesitan de redes de contacto y capital financiero”, explicó Kantis. Es decir, que al país le falta trabajar en consolidar un capital social, basado en la confianza.
Estos dos indicadores se muestran en un balance bajo y los pilares adicionales que están en un estadio medio - bajo son las condiciones sociales y la estructura empresarial. Es decir, son 4 aspectos en los que hay que poner mayor atención para estimular el emprendimiento.