La justicia transicional no debería ser solo para los combatientes. Al mirar el panorama en el que se ha desarrollado el conflicto armado durante 50 años, han participado de este los grupos armados, pero también financiadores y auxiliadores que, en muchos de los casos, fueron castigados con las penas más altas, mientras que los perpetradores de los crímenes recibieron beneficios jurídicos.
Desde esa perspectiva, el expresidente César Gaviria lanzó lo que él mismo calificó como una reflexión personal —con visos de propuesta—, relacionada con los procesos de justicia transicional, más ahora cuando la discusión se abre camino en la mesa de negociación con las Farc.
“Es apenas justo que los no combatientes reciban indulto a cambio de su reconocimiento de los delitos cometidos, de su solicitud de perdón y de su voluntad de reparar a las víctimas. A mi juicio se ha ignorado el principio de igualdad que debe regir en nuestra justicia según la Constitución de 1991”, precisa el expresidente Gaviria.
La reflexión del exmandatario nacional incluye a miembros de la Fuerza Pública que en un futuro pudieran verse inmiscuidos en investigaciones por denuncias “presentadas por los ciudadanos en los estrados judiciales o en los medios de comunicación”.
Propuesta bien recibida
La propuesta del expresidente César Gaviria tuvo ecos favorables y fue calificada como conveniente por diferentes sectores. Una de esas voces a favor fue la del ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, que calificó la idea como razonable y necesaria, sobre todo para algunos miembros de la Fuerza Pública que pudieron tener problemas con acciones desarrolladas en medio del conflicto armado y “que necesitan soluciones definitivas”.
En el debate, que la Justicia Transicional sea un saco en el que caben tanto los combatientes como los que de alguna manera sirvieron de combustible para azuzarlo, es pertinente, afirma la directora en Colombia del Centro Internacional de Justicia Transicional, ICTJ, María Camila Moreno.
Para Moreno, si con la propuesta del expresidente César Gaviria se busca reconocer las múltiples responsabilidades políticas para superar el conflicto, su idea es viable, siempre y cuando este siempre presente el tema de la verdad, la justicia y la reparación.
“Es muy importante entender que la verdad, la reparación y la justicia no es solo para los excombatientes, sino que en la perspectiva de una paz estable y duradera es necesario que esos otros actores también acudan a los mecanismos de justicia transicional, y si tienen responsabilidad en victimizaciones, que contribuyan a la reparación de las víctimas”.
Sin embargo, algunos gremios representantes de policías y militares retirados insisten en que si bien es necesaria la justicia transicional para los combatientes, sean guerrilleros o integrantes de la Fuerza Pública, no hay claridad sobre la dosificación de las penas, y sostienen que no se pueden equiparar los delitos cometidos por los subversivos como fuerza ilegal, a los excesos que en desarrollo del cumplimiento del deber pudieron cometer soldados o policías.
—Esa es la gran dificultad, dice el capitán (r) Juan Alfonso Fierro Manrique, no es lo mismo juzgar a “Timochenko” que a un teniente o un cabo que cometió un exceso.
El capitán (r) Fierro Manrique, presidente de Analvet (Asociación Nacional de Veteranos de la Fuerza Pública), enfatiza en que ellos están de acuerdo con que ninguno de los delitos cometidos por los combatientes queden en la impunidad, pero “tampoco queremos que los militares vayan a pagar lo mismo que los guerrilleros”.
El simple razonamiento — o propuesta— del expresidente Gaviria, abre el debate en el país sobre la conveniencia de la justicia transicional para todos los implicados, como una forma de evitar la impunidad en las acciones del conflicto armado en Colombia.
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ciclos de negociación se han adelantado entre el Gobierno y las Farc en la mesa de diálogos en La Habana.