En el Nordeste antioqueño no le temen a la apuesta
por mejorar la calidad del café. Sin embargo,
piden garantías y mayores incentivos.
*Enviados especiales, Amalfi y Santa Rosa de Osos
Fernando García toma poco café. Lo dice con timidez, como si fuera uno de los pocos secretos que no quiere revelar. A pesar de esa confesión, desde su casa, en la vereda El Guayabito del municipio de Amalfi, basta con dar unos pocos pasos en cualquier dirección para toparse con los cafetales que cuida y conoce con orden matemático.
Responde de memoria que tiene 9,2 hectáreas sembradas, que son en total 50 mil árboles y que el 70 por ciento de ellos son de la variedad Castillo, el 30 por ciento restante, de la variedad Colombia.
Tiene en la cabeza el número de cargas que produce por hectárea, lo que se paga en el mercado por cada libra de café y su variación con los precios de los años anteriores....
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