En el ingreso al coliseo de la Universidad de Medellín la colonia de chocoanos se hizo notar con cerca de 300 personas que, con banderas, tambores y pitos se fueron apoderando de la tribuna del costado derecho “metiendo presión” con el cántico de “sí se puede, sí se puede” que retumbó ayer en el escenario.
Los jugadores de Academia sabían que no podrían defraudar a sus seguidores, quienes a pesar de ser menos (unos 200) y ayudados con pitos y sus voces no pararon de animarlos desde el inicio.
Los dirigidos por Hernán Darío Giraldo se brindaron al máximo, entregaron todo en el maderamen e impulsados por el amor propio sacaron adelante un juego que terminó siendo otro clásico.
En las graderías el descontento era general con la “estrella” Tyler Murray, quien sin dar explicaciones se fue del país el viernes pasado dejando mermado el equipo en esta instancia semifinal. A pesar de eso, y de la derrota del sábado (58-73) la esperanza estaba puesta en la victoria. Al final, con lucha y convicción los jugadores liderados por Simón Granados alcanzaron la clasificación, tras vencer 74-65 a Cimarrones, dejando 2-1 la serie.
Vibrante de principio a fin
En el primer periodo los chocoanos dejaron claro que querían la victoria y se fueron adelante 21-18, con una cesta de ensueño marcada por Amir Caraway que arrancó los aplausos de los 584 espectadores.
Para el segundo periodo, Giraldo envió al campo al colombo-italiano Gianluca Bacci, quien se convirtió en el socio ideal para Granados y en un recuperador de balones increíble que diezmó el ataque y la resistencia de Cimarrones, logrando dejar el marcador 36-31 a favor.
Ya en los dos tiempos definitivos, Academia no bajó los brazos y sacó adelante el juego, ganándolos 59-47 y un definitivo 74-65 para convertirse en el segundo finalista del campeonato profesional.
Giraldo agradeció a los asistentes que siempre motivaron al equipo, he hizo un llamado para que los aficionados llenen el coliseo este miércoles, cuando reciban a Fastbreak, a las 9:10 de la noche.
“Me siento feliz y orgulloso de este grupo, dieron todo. Jugamos mejor, con una muy buena defensa que nos dio más tranquilidad para salir al ataque, es un triunfo muy valioso que nos deja en la final y con la ilusión de defender el título”, sostuvo.
El técnico de Cimarrones Plinio Rosero, por su parte, juzgó el desempeño de los árbitros y manifestó que demandarían el partido por la ausencia de dos jugadores extranjeros en el campo.
Anabel Pineda, presidenta de Academia dejó claro que el equipo presentó al puertorriqueño Gary Díaz, el dominicano Óscar Balbuena y el colombo-italiano Gianluca Bacci.