Bolivia recibió este fin de semana al Chapecoense en varios homenajes que incluyeron un encuentro con Ximena Suárez, la azafata que sobrevivió a la tragedia aérea donde donde en noviembre pasado pereciera gran parte del plantel del equipo.
“Agradecemos a todos los bolivianos por el gran recibimiento, por el cariño y por tener solidaridad con un club que sufrió la más grande tragedia de su historia”, señaló Nei Maidana, vicepresidente del conjunto brasilero.
Un equipo alterno del Chapecoense llegó a La Paz para jugar el sábado por la noche un partido amistoso con Bolívar, uno de los planteles más populares del balonpié boliviano.
Humos de color verde y celeste recibieron a los planteles, un minuto de silencio, intercambio de recuerdos y obsequios de camisetas a la afición asistente al Estadio Hernando Siles, caracterizaron el tributo.
El momento más emotivo se vivió durante el encuentro que sostuvieron en la ciudad de Santa Cruz la delegación del club brasileño con Ximena Suárez, la azafata de la empresa LaMia, una de las seis personas que sobrevivieron a la tragedia ocurrida el pasado 28 de noviembre cerca de Medellín, Colombia, antes de la primera final de la Copa Sudamericna con Atlético Nacional.
